Alcoholismo y sus enfermedades derivadas (+ Video)

El alcoholismo es una situación muy grave a nivel social, médico y psicológico, y afecta tanto a mujeres como a hombres. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los hombres tienen hasta tres probabilidades más que las mujeres de desarrollar una adicción al alcohol.

Más allá de las graves consecuencias que tiene el alcohol en la vida, en la mente y en el organismo, es ampliamente reconocido que existen numerosas comorbilidades derivadas del mismo. Son las enfermedades que acostumbran a aparecer vinculadas a beber en demasía. La comorbilidad es una palabra acuñada en 1970. Este término se refiere a la presencia de uno o más trastornos asociados a la enfermedad primaria de base.

En relación al alcoholismo, existen múltiples comorbilidades a dicha adicción, tanto en relación a trastornos mentales como a enfermedades propiamente dichas. En la práctica clínica, cada vez es más difícil encontrar casos “puros” de alcoholismo, pues la mayoría de ellos ya traen con ellos uno o más trastornos asociados.

Hay que destacar, además, que, en el terreno de las adicciones, es altamente frecuente encontrar en los pacientes la denominada poli dependencia o adicción a más de una sustancia.

LOS TRES GRANDES GRUPOS DE ALCOHOLISMO

Existen diferentes tipos de consumo alcohólico con patrones bien diferenciados. Ellos tres son los pacientes que habían sufrido una intoxicación alcohólica, aquellos de alto consumo de riesgo y los pacientes ya con dependencia alcohólica. Las personas de cada grupo pueden pasar a otro con el tiempo o volver al grupo inicial,

• Consulte además: El alcoholismo sí produce cirrosis hepática mortal.

El grupo de intoxicación alcohólica en general se trataba de un grupo joven, en quienes existían trastornos emocionales pasajeros asociados, pero sin repercusiones corporales ni psiquiátricas.

En el segundo grupo, el grupo de alto consumo de riesgo; comprende un consumo perjudicial o abusivo, tanto de alcohol como de otras sustancias, y en ellos se encontró una gran inestabilidad social y familiar, así como alteraciones psiquiátricas graves asociadas.

En el grupo con dependencia alcohólica, habitualmente de edad madura, se encontraron graves secuelas a nivel orgánico y cerebral, sumadas a una fuerte tendencia al aislamiento y a síntomas depresivos.

ALCOHOLISMO Y MENTE

En relación a los trastornos mentales, la perturbación por alcoholismo se vincula a otros cuadros psiquiátricos. Esto quiere decir que solo por el hecho de padecer alcoholismo, existe un riesgo añadido de sufrir también este tipo de trastornos, tanto durante el inicio del trastorno adictivo como incluso con el paso del tiempo.

Dichos trastornos son dependencia y abuso a otras sustancias, tales como sedantes, hipnóticos, cannabis, cocaína, heroína, ansiolíticos y anfetaminas; otros más son esquizofrenia, depresión, ansiedad, insomnio, aumento del riesgo de accidentes, violencia y suicidio, trastornos de la personalidad, especialmente el antisocial con aumento de la probabilidad de cometer actos criminales, problemas sociales, por ejemplo, ruptura familiar o pérdida del vínculo laboral. Los principales trastornos y/o síntomas asociados al alcoholismo, a nivel psicopatológico, son de carácter ansioso-depresivo.

Los síntomas observados en los alcohólicos se presentan en mayor proporción que en la población general sin alcoholismo. Además, es importante señalar como la frecuencia y la intensidad de tales síntomas se relacionan con la gravedad de la dependencia alcohólica. Los síntomas asociados son más graves en los pacientes con un alcoholismo más serio.

Otra de las comorbilidades del alcoholismo frecuentemente observada es el juego patológico o ludopatía en el 20% de los pacientes alcohólicos; la gravedad de los síntomas de la ludopatía guarda relación con un problema de alcoholismo más grave.

Los trastornos de personalidad son otra de las comorbilidades del alcoholismo frecuentemente observadas especialmente el trastorno antisocial; la personalidad y la comorbilidad existente entre el alcoholismo y ciertos tipos de trastornos de personalidad, se sitúa entre el 22 y el 64% de los casos, y eso es bastante alarmante.

PROBLEMAS MÉDICOS ORGÁNICOS

Más allá de las numerosas comorbilidades del alcoholismo mencionadas en las esferas psíquicas y social, se deben tener presentes sus repercusiones y consecuencias a nivel orgánico, pues el alcohol es una droga altamente perjudicial para la salud, que puede causar importantes y graves problemas de hígado, páncreas, corazón, disfunciones sexuales, etcétera, además de las graves consecuencias sociales, personales y laborales derivadas de su consumo.

Otro dato muy alarmante es que la esperanza de vida de las personas alcohólicas se reduce, como promedio, 20 años respecto a la población normal no alcohólica.