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martes, 15 de octubre de 2024

Influencer

Siempre han existido esas personas que más que dar información importante, les gusta sentirse importantes...

Félix Arturo Chang León
en Exclusivo 01/09/2023
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Influencer
Al ritmo de la frase “La última la traigo yo” hay quienes son capaces de alterar los datos inventando lo que les falta. (Alfredo Lorenzo Martirena Hernández / Cubahora)

Hay anécdotas que se van transmitiendo a través de los años, se van cambiando porque le agregan, suprimen o hasta convierten en todo lo contrario a cómo sucedieron, pero desde principios de los años 70 del siglo pasado escucho un par de ellas.

Dicen que durante una entrevista sobre temas internacionales, la personalidad notó que el fotógrafo estaba muy interesado en apretar el obturador de la cámara cada vez que tocaba la caja de cigarrillos, ocasiones en que impedía ser retratado.

Otro caso fue el de fotógrafos que buscaban la oportunidad de hacer la imagen cuando al político le quedaba al descubierto en su muñeca el reloj de una marca muy famosa por aquellos años.

Sin que este redactor pueda asegurar que sucedió o no, lo cierto es que recuerda que tales casos eran citados como una especie de cacería para captar oportunidades en las cuales vincular a esas personalidades con algún producto al cual hacerle publicidad comercial.

Explican que era la llamada “publicidad gratuita” porque la persona utilizada no cobraba, y son casos de líderes de opinión por destacarse en la cultura, el deporte, la política o cualquier otra esfera de la vida a quienes los conglomerados escuchan y hasta toman como ejemplos a seguir.

Por cierto, ahora que por doquier va apareciendo un negocio en el cual sus emprendedores aumentan o disminuyen las ganancias según los clientes que atraigan, hay especialistas en comunicación que alertan sobre no hacer ese tipo de publicidad, pues según nuevas legislaciones, pueden cobrarse.

Volviendo al tema de esos individuos capaces de ejercer influencia sobre un alto número de personas, diremos que siempre han existido, sobre todo en esas tertulias callejeras habituales en zonas de los parques, lugares de prestación de servicio o esquinas de cualquier barriada.

Eran verdaderos personajes que dominaban las técnicas de hacerse visible en sitios y horarios más propicios para ser vistos y escuchados, leían y estaban atentos a la radio y la televisión, captaban los datos y tenían conocimientos para analizarlos, comentarlos y hasta pronosticar el rumbo de los acontecimientos.

No hablaban a tontas y a locas, sino que tenían estudiadas las características de los oyentes y les daban los elementos de interés específico, pero lo más importante es que conversaban cuando les expresaban dudas, contradicciones o les hacían preguntas.

Quienes por falta de tiempo, hábito o cualquier otro motivo no accedían a los medios de prensa tradicionales de la época, recibían las noticias comentadas e interpretadas y había periodistas que llegaron a decir: yo me dirijo a los líderes de opinión y a través de ellos llego a los demás.

De esos famosos en sus ámbitos solía decirse: “¿Fulano? Ese cuando no sabe, las inventa en el aire. Y lo mejor del caso es que después resulta como él dijo porque tiene tantos datos que saca conclusiones hasta de donde no hay.”

Así más o menos eran aquellos precursores de los que hoy se conocen como influjencer, nombre con que se identifica a la “persona que destaca en una red social u otro canal de comunicación y expresa opiniones sobre un tema concreto que ejercen una gran influencia sobre muchas personas que la conocen; especialmente, cuando influye en los hábitos de consumo de sus seguidores.”

Existe el influencer de moda y maquillaje, o de cualquier producto a la venta, pero también los hay en materia política con propósitos no bien intencionados con ofertar lo mismo a un corrupto que a tramposo para el más alto de los cargos públicos por tal de recibir una paga.

Prometemos que en próximos viernes continuaremos el tema, y agradecemos la participación en un intercambio en el cual tendremos en cuenta todo lo que los amables lectores digan sobre todo si se refieren a los que “inventan” noticias o buscan ser vistos como importantes. También: cómo actuar ante ellos.


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Félix Arturo Chang León

Periodista cubano de origen chino que nació y vive en Cuba. Santa Clara. Dirigió el periódico Vanguardia durante 16 años.


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