Crimen y castigo

Comienza el show. Algunos vaticinarán el fin de ciclo del Barcelona, otros hablarán del Bayern, del buen momento y de que este año se desquitaran de la final perdida en casa la temporada pasada. Las ventas de los periódicos se multiplicarán durante esta semana con todo tipo de especulaciones, algunas de ellas basadas en hechos verídicos o en fabulaciones del redactor de turno, porque no hay ningún tipo de duda acerca de lo ocurrido en el Allianz Arena.

Los de casa dieron una clase magistral de fútbol, desaparecieron de la cancha a su rival y marcaron los goles como mejor lo hacen los alemanes: dos toques dentro del área y contraataques vertiginosos. Hablar de figuras en el Bayern de Múnich no es justo, todos colaboraron en la victoria, excepto Neuer, él se aburrió un poco. 

El desgaste físico de ciertos jugadores para neutralizar la medular creativa del Barça fue la clave; Iniesta presionado y apagado (pero aun así luz de su equipo) y Xavi desaparecido. El resto fue fácil, Pedro era un fantasma y el chileno imitaba al peor Ariel Ortega: muchas carreras por toda la cancha en vano. Lo de Messi merece un post, un artículo, un ensayo y un libro; poner a jugar a hombre que a todas luces no está recuperado de su lesión es inhumano; no fue como ante el PSG, cual suerte de Cid Campeador apuntalado sobre Babieca después de muerto para infundir miedo al rival. Esta vez esperaban un milagro del lisiado y les faltó confianza para tomar las armas y dejar claro que no son equipo de un solo hombre; no culpo a los jugadores, sino a la dirección técnica que veía como los minutos pasaban y se negaban a sacarlo; mantuvieron al genio los noventa minutos cojeando por el campo, como mago sin su báculo.

Los alemanes no le permitieron una, porque con futbolistas como Messi, aunque esté lesionado, no hay concesiones. Si me preguntan por el fin de ciclo digo que sí; el Barça necesita renovación absoluta en el banquillo técnico. No fichar un central de garantías, traer a Song para disfrutar de la temporada como suplente y la renovación de contratos a figuras ya en el ocaso muestran una ceguera absoluta. Puyol y Xavi no pueden retirarse siendo titulares, necesitan un relevo que no está en la cantera. Fíjense cuán perdido estaba este equipo tácticamente, que las dos ocasiones más claras las tuvo Bartra, un central inexperto y con apenas minutos con los azulgranas. 

Y perdóname Alemán33, pero  sin pasión no se puede escribir de nada. El Bayern se vistió de Alemania y rememoró la goleada 4-0 ante Argentina en el 2010. Goles de cabeza alemán con jugadas a balón parado alemán, contraataques alemanes y al final, simple y llanamente, superioridad alemana. No comprendo cómo Thomas Müller no es titular indiscutible en este equipo, como igual me cuesta comprender la suplencia de Mario Gómez. Ese es el misterio de los dirigidos por Heynckes, un banquillo de suplentes inigualable. Los cambios apenas se notan y cuando un equipo tiene tanta profundidad en su plantilla, puede aspirar a lo más alto del podio. Si ganan la Champions este año, Guardiola llegará con la parada bien alta, nada que ver con el Barça de los seis títulos a principios de temporada.

Medallas al valor, porque si Tito jugó al Soccer Manager yo también lo hago, para Ribery y Bastian por las labores defensivas, para Müller por su olfato, para Mario por saber aprovechar las oportunidades y para Piqué por jugar tan bien y encajar cuatro goles; eso no se ve todos los días.

Para la vuelta que nadie sueñe con milagros porque ni Jesucristo, ni Maradona junto a Ronaldo el brasileño, ni con Zidane y Baggio en la media y Tsubasa portando el diez, ni con Cruyff y Beckenbauer lograrán una remontada. No hay comparaciones entre el Milán hace unas semanas y este equipo alemán. Soñar es hermoso pero la vida no tendría gracia si todos nos sacamos la lotería.