Radiografía para "tulipanes" (+Fotos)

La fase clasificatoria de la primera edición de la UEFA Nations League llegó a su fin luego de seis intensas jornadas. Tal y como ocurriera en la más reciente edición de la Copa del Mundo, la Alemania de Joachim Löw resultó ser el elenco decepción al perder la primera categoría exhibiendo un fútbol errático, torpe y muy lejos de su capacidad. Sin embargo, mientras las deidades que rondan entre las esféricas dan la espalda a la mítica “Mannschaft”, ahora, caprichosas al fin, parecen favorecer a una impetuosa y enchufada Holanda. 

Convertida en la sensación de la lid, los dirigidos por el exzaguero Ronald Koeman han resurgido de la nada con un estilo de juego atrevido, vistoso y arriesgado por momentos. Luego de poco más de cuatro años fuera de los radares, la nueva selección naranja parece venir dispuesta a “comerse” al mundo y a recuperar el terreno cedido a eternos rivales como España, Francia, Portugal y a la propia escuadra germana.

Desde la llegada al banquillo nerlandés a principios de este año, Koeman entendió que solo existía una única vía para hacer olvidar de una vez y para siempre la ausencia de los tulipanes en la Euro de 2016 y en la recién finalizada cita mundialista: jugar bien y ganar. Osado como es, lejos de ceñirse al guion, abogó por formar un conjunto diferente, adecuado a las virtudes de los futbolistas de estos tiempos, pero, sobre todo, a sus deficiencias. 

Ronald Koeman continúa apostando por el fútbol ofensivo y vertical que ha caracterizado a las selecciones holandesas (Foto: Marca).

Con jugadores como Arjen Robben, Robin van Persie o Wesley Sneijder mirando ahora desde las gradas, el DT se propuso dar cuerpo a una oncena con la frescura y la insolencia necesaria para plantársele de tú a tú a cualquiera. Fue así como comenzaron a vestir la playera nacional “niños” con criterio y personalidad en el trato del balón, pero aún más importante, con la vocación ofensiva necesaria para poder llamarse herederos de la tradición futbolera holandesa.

Para seguir rompiendo esquemas, el míster desechó el clásico 4-3-3  por un atrevido 3-4-3, un sistema ciento por ciento agresivo que garantiza mucha mayor presencia por las bandas y mejor dominio de la medular del campo. Luego de esto, solo le restó enrolarse en la búsqueda de los “elegidos”.

Quizás una de las posiciones más fáciles para decidirse fue la portería. Jasper Cillesen puede que no sea ni la sombra del inolvidable Van der Sar, pero sí continúa con la tradición de metas holandeses confiables y seguros bajo los tres palos, pese a no contar con muchos minutos en el FC Barcelona.

La juventud es el nuevo camino holandés (Foto: Marca).

Un poco más adelante, encontramos jugadores jóvenes con estilos bien diferentes. Con Matthijs de Ligt y Virgil van Dijk como referentes en la defensa, Koeman apuesta por las condiciones físicas de sus zagueros, no solo para buscar el remate de cabeza desde el córner, sino también para salir jugando con balón controlado desde atrás. El centro del campo lo gobierna con apenas 21 años Frenkie de Jong, quien gracias a su visión y siempre precisa ubicación ofrece movilidad al juego y crea espacios. No obstante, otras figuras no tan bisoñas también han sabido venir de menos a más. Memphis Depay y Ryan Babel se han visto en los últimos encuentros fortalecidos y con la disposición hacia el ataque que se espera de ellos. 

En resumen, esta es la asombrosa Holanda capaz de vencer a los últimos dos monarcas del orbe y colarse como si nada en el Final Four de la Nations League, con las ganas de labrarse un espacio junto a la leyenda Johan Cruyff como único argumento. Este no es un equipo del presente ni mucho menos, todo cuanto en definitiva logre caminar este extraordinario grupo de muchachos lo sabremos dentro de un tiempo. ¿Quién sabe? Quizás dentro de muy poco hablemos de la soprendente nueva "Narranja Mecánica".