Medicina Natural y Tradicional, con la ciencia como guía

El uso de medicina natural y tradicional (MNT) tiene auge en el planeta, con apoyo de investigaciones científicas que avalan sus propiedades sus propiedades curativas. Tal es el caso que el 88% de los estados miembros de la Organización Mundial de la Salud reconozcan su empleo.

De hecho, por su empleo muchas veces milenario y un acceso más fácil, esta es la primera opción terapéutica a la que acuden millones de personas en el mundo, refiere la Organización de Naciones Unidas (ONU). Además, se vincula en la atención médica moderna. Por ejemplo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor del 40% de los medicamentos usados en la actualidad se basan en productos naturales. Así ocurre con fármacos de referencia como el ácido acetilsalicílico (aspirina), la artemisina e incluso tratamientos contra el cáncer infantil.

Sin embargo, se hace necesario llegar a consensos y regular adecuadamente su uso basados en la evidencia. Esta fue la misión fundamental que tuvo la Primera Cumbre Mundial de la OMS sobre Medicina Tradicional. La cita se celebró en Gandhinagar (India) de forma paralela con la Reunión de Ministros de Salud del G20 y en ella participaron expertos en la materia de todo el planeta.

A los escépticos, el director general de la OMS, Tedros Ahhanom Ghebreyesus, explicó que se crean datos y pruebas para que sirvan de base a las políticas y reglamentos para un uso seguro, rentable y equitativo de este tipo de medicina. Comentó que las medicinas tradicionales pueden aliviar deficiencias de acceso a la atención médica, pero solo tienen valor si se emplean en base a la evidencia científica. Ejemplo de ello fue la creación del Centro Mundial de la OMS para la Medicina Tradicional.

“La medicina tradicional, complementaria e integradora es especialmente importante para prevenir y tratar las enfermedades no transmisibles y la salud mental, así como para un envejecimiento saludable”, añadió. 

En la cumbre, que aspira a celebrarse de forma anual, los miembros de la OMS cerraron un compromiso fuerte para aprovechar el potencial de la medicina tradicional con base científica para mejorar el acceso a la atención sanitaria a nivel global, de forma que contribuya al bienestar de las personas y los objetivos de Desarrollo Sostenible para 20230.

Según la encuesta de la OMS sobre medicina tradicional en 2023, alrededor de 100 países ya cuentan con políticas nacionales y estrategias para su uso. Entre esas naciones se encuentra Cuba, que cuenta con un programa que regula el uso de las diez modalidades aprobadas en el país.

A decir del doctor Johann Perdomo Delgado, jefe del departamento de MNT del Ministerio de Salud Pública (Minsap), en la mayor de las Antillas se integra en los tres niveles de atención del Sistema Nacional de Salud, con más del 88% de su uso en la atención primaria. “Aquí el principal escenario para su desarrollo son las consultas de la especialidad en los Servicios de Rehabilitación Integral, donde se aplican la mayoría de las modalidades terapéuticas reguladas en el país, pero con mayor fuerza la acupuntura y sus técnicas afines”, comenta.

Además, la medicina natural se emplea en el cuadro básico de medicamentos. Para el año 2023 los productos naturales aprobados son de 178 renglones, de ellos 114 producidos a nivel local-dispensarial y 64 por la industrial.

En Cuba el empleo de este tipo de medicina está regulado por el Minsap y el Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (CECMED). Su uso, más allá que una alternativa, es una necesidad recurrente que generaciones de cubanos hacen suya.