Revolucionarios de Venezuela en movilización por la paz

El pueblo revolucionario de Venezuela respondió masivamente a la convocatoria del presidente Nicolás Maduro de efectuar una marcha por la paz ante la oleada de agresiones fascistas organizada por la extrema derecha de ese país, en lo que se considera una intentona de golpe de Estado con un guión muy parecido al de 2002, cuando intentaron acabar con el liderazgo del Comandante Hugo Chávez Frías.

Desde que el fallecido mandatario Chávez Frías asumió el gobierno en elecciones legítimas en 1999, la derecha interna y regional ha utilizado todo tipo de artimañas lascivas a la población que apoya mayoritariamente al llamado Socialismo del siglo XXI, en una agenda que repite las estrategias de hace 13 años, ahora reactivadas en el gobierno de Maduro.

El actual presidente ha llamado al diálogo y a la paz desde que tomó las riendas del país en elecciones democráticas en abril del pasado año, un mes después de la muerte de quien fuera su mentor y de quien se considera hijo político. Sin embargo, aunque ha logrado conversar de manera racional con algunas fracciones opositoras, la derecha más radical demuestra desinterés en situar a Venezuela por encima de los intereses personales de sus líderes.

En su convocatoria a la marcha por la paz, Maduro reiteró que en ese entorno se realizarían acciones culturales, deportivas y sociales, obra del Movimiento por la Paz y la Vida, lo que refuerza la magnitud pacífica de la concentración que salió de la Plaza Venezuela y culminó en la histórica Avenida Bolívar.

INTENTONA DE GOLPE DE ESTADO DE ALA RADICAL DERECHISTA

En varias ciudades importantes venezolanas se desató el pasado miércoles, Día del Bicentenario de la Libertad y Día de la Juventud, la furia de los neonazis, que con sus acciones vandálicas dejaron un saldo de tres personas muertas, 66 lesionados, edificios semi-destruidos, y 56 vehículos -11 de ellos estatales- quemados en la vía pública.

Luego de que se retiraran la mayoría de los estudiantes izquierdistas y de la oposición, aparecieron grupos violentos que destruyeron la fachada de la Fiscalía General de la República e intentaron marchar hacia el Palacio de Miraflores, con el interés de asesinar a Maduro, según confirmó el mandatario en una intervención televisiva.

Pero en este arriesgado plan de la derecha radical parece que a los jóvenes estudiantes se les han unido paramilitares colombianos y expertos terroristas, según denunció el  gobernador del estado Táchira, José Gregorio Vielma Mora, quienes se han unido a las protestas supuestamente estudiantiles en ese territorio.
Vielma Mora informó a TELESUR que “se han sumado a las protestas paramilitares colombianos, terroristas, expertos, que querían destruir una subestación eléctrica (…) lo que representa que 63 mil personas se iban a quedar sin luz por lo menos en seis semanas”, alertó.

Informó que lograron abrir el acceso al Hospital Militar Cap. (AV) "Guillermo Hernández Jacobsen" y al Hospital Nacional de San Cristóbal, espacios tomados por los manifestantes y precisó que los atacantes generaron daños a la Dirección de Salud Ambiental de su gobierno e intentaron incendiar varias sedes de los Centros de Atención Integral del Estado, además de realizar daños a la sede de la Universidad Bolivariana de Venezuela.

Además, el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Investigación (MCTI)  indicó este viernes que unos 60 portales web de instituciones venezolanas resultaron afectadas en su disponibilidad como consecuencia de un ataque cibernético, otra faceta de los ataques fascistas a las instituciones oficiales.

La fuente también denunció que en Maracaibo (entidad del noroeste del país) un grupo violento atacó un camión que trasladaba equipos de la estatal de comunicaciones, Movilnet.

Aunque este viernes Venezuela amaneció en tranquilidad, el jueves en la noche un pequeño grupo de supuestos estudiantes universitarios de derecha asedió la sede de un medio de prensa bolivariano, lanzando cocteles Molotov, piedras, e incendiando vehículos alrededor del edificio.

El gobierno logró identificar a los autores intelectuales y materiales de esta intentona de golpe de Estado, entre ellos la diputada a la Asamblea Nacional María Corina Machado, el exalcalde de Cachao, Leopoldo López, el alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, e Iván Carratú Molina y Fernando Gerbasi. Estos dos últimos sostuvieron una conversación telefónica previa a los ataques, en los que brindaban las señas de los casi inmediatos actos de violencia.

MEDIDAS CONTRA EL FASCISMO

Respaldados por la mayoría de la población bolivariana, los estudiantes universitarios revolucionarios, militares en reserva, pueblos indígenas, naciones amigas e instituciones integracionistas, Maduro se reunió con sus Ministros y altos jefes militares de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana para llamar a la cordura a los extremistas y convocar a la gran concentración de apoyo al Plan de Pacificación y Convivencia Nacional.

Una vez más, con su política de amor y paz, pero con su habitual firmeza, el Mandatario pidió a los opositores desvincularse de las acciones terroristas, y prometió proteger a la ciudadanía con el cumplimiento del Plan de Pacificación, nacido de más de mil propuestas emitidas por los ciudadanos desde distintos puntos de la nación suramericana.

El hasta ahora considerado líder de la derecha, el gobernador del Estado Miranda, Henrique Capriles, se deslindó de las acciones terroristas por no considerarlas una vía democrática, al igual que otros dirigentes de partidos opositores.

En las últimas horas, las autoridades venezolanas efectuaron planes de intercambio con estudiantes de varias universidades, en el interés de que ese sector se involucre con sus aportes al Plan Nacional de Pacificación.

El ministro de Educación Universitaria, Ricardo Menéndez, afirmó que la gran mayoría de los alumnos de ese nivel de enseñanza están comprometidos con la construcción de la paz y estimó que son alumnos simpatizantes de la derecha los que fomentan actividades de protesta, aunque no se comprobó aún si participaron en los recientes actos vandálicos.

Seis instituciones universitarias en la capital venezolana fueron visitadas este viernes en Caracas, donde hubo diálogos respetuosos sobre el proceso bolivariano y distintas medidas a tomar en esos centros de estudios superiores. Similares actividades hubo también en los estados de Zulia y Táchira –donde también se desató el fascismo-.

Se anunció que las universidades Central de Venezuela, Católica Andrés Bello, Los Andes, Carabobo, Santa María, Centroccidental Lisandro Alvarado, del Táchira y Rafael Belloso Chacín suspendieron sus actividades académicas y administrativas hasta este lunes, debido a la violencia generada contra instalaciones públicas.

Los próximos días y semanas serán decisivas para Venezuela, que ha aguantado con estoicismo desde 1999 planes de atentados, intentos de magnicidio, huelgas, guerra económica, y ahora la violencia fascista. Hechos que recuerdan los planes de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos contra el gobierno de Salvador Allende en 1973, con la diferencia de que hoy el entorno político latinoamericano es diferente y los pueblos de esta región no están dispuestos a que la derecha vuelva a salirse con la suya.