Despedida para los amantes del mejor tabaco del mundo

Empresarios, coleccionistas, catadores, artistas y amantes en general del tabaco cubano compartieron espacio, desde el martes 26 de febrero, en La Habana. Una palabra en común los unía: Habanos, el famoso tabaco cubano fabricado con las manos, que ya suma unas 27 vitolas esparcidas por el mundo, de gran atracción para los turistas.

Luego de varias jornadas provechosas para los cientos de admiradores de este tabaco, este sábado 2 de marzo llegó a su fin el XV Festival del Habano.

Durante la cita, unos 1.500 especialistas, provenientes de 70 países,  pactaron negocios, recorrieron plantaciones y fábricas donde se tuercen los reconocidos puros cubanos, y hasta les fue posible presenciar cómo un grupo de chefs croatas incursionó en la preparación de exquisitos platos con la hoja del tabaco, como mantequilla, salsas, helado.

Más allá del adverso entorno económico y legal al que se enfrenta el tabaco de origen cubano, esta edición del Festival coincidió en ratificar al Habano como líder mundial en productos de su tipo.

Voceros presentes en la cita argumentaron que este era un período de estabilidad y desarrollo para la comercialización mundial de los Habanos, y explicaron que España, Francia y China constituían los principales mercados.

 De acuerdo con la  directora de Marketing Operativo de la Compañía Habanos S.A., Ana López, las exportaciones de Habanos en 2012 crecieron seis por ciento con respecto al año anterior, pues al cierre de diciembre se habían facturado 416 millones de dólares del producto.

No obstante, el bloqueo estadounidense sobre Cuba entorpece la comercialización de los Habanos. Según se explicó, el mercado estadounidense acapara 220 millones de unidades.

En caso de terminarse esas medidas de bloqueo, explicaron, Cuba podría participar con alrededor del 70 por ciento de esas ventas, y llegar a colocar 150 millones de unidades en un plazo de 10 años. De ahí que las cifras de pérdidas por esas ventas alcancen entre los 350 ó 450 millones de dólares.

 UN PREMIO POR LOS CINCO

El Festival del Habano se celebra en Cuba desde el año 1994 y usualmente cierra con la realización de una subasta, cuyos ingresos son destinados íntegramente al sistema de salud cubano.

Durante esta ocasión, en la que estaban en subasta seis lotes de humidores, que contenían entre 350 y 550 Habanos de las famosas marcas H. Upmann, Hoyo de Monterrey, Romeo y Julieta, Partagás, Montecristo y Cohíba, así como una vajilla de la firma Sagardelos, el resultado final llevó a la recaudación de 890.000 euros (más de un millón de dólares).

En la clausura, se entregaron los premios “Habanos del Año”, en los que resultaron galardonados en la categoría de “Producción”, el directivo del Grupo Tabacuba, Osvaldo Encarnación; en el área de “Negocios” el subdistribuidor de Habanos S.A. en el Caribe, Mauricio Abrahamabady, y en “Comunicaciones”, el premio fue para Phoenicia Chipre, distribuidor de la Corporación en el Medio Oriente y África.

El galardón especial del evento cayó en manos del actor estadounidense Danny Glover. Se trataba de una escultura de plata del orfebre Raúl Valladares, que le fue entregada por “su defensa a la paz y su lucha por la justicia del pueblo cubano”.

Al recibir el premio, Glover mostró una vez más su solidaridad con el caso de los Cinco cubanos presos en cárceles estadounidenses.

“El Premio del Festival significa mucho para mí, pero me siento honrado y afortunado de poder dedicarlo a todo el pueblo cubano, por sus años de lucha, en los que creo. Defiendo la justicia, y he creado un compromiso muy serio con el proceso de defensa y liberación de los cinco Héroes cubanos, a quienes prometí que haría todo lo posible para contribuir con su regreso a la Patria. Me siento al servicio del pueblo cubano y de la Revolución Cubana.”, expresó Glover en la entrega del premio.