Causas y un mal efecto. Las medidas anunciadas en la pasada sesión plenaria de la Asamblea Nacional del Poder Popular detonaron en una interpretación errónea por algunos boteros: aumentar el precio del pasaje de las rutas que conectan varios puntos en La Habana.
Casi de inmediato las autoridades correspondientes tomaron acciones para frenar el aumento de hasta el doble del pasaje en varios tramos de la ciudad. El Director Provincial de Transporte en La Habana, José Conesa González, informaba sobre el inicio de un proceso de notificación a todos los transportistas y sus ayudantes, donde se dejaba por escrito el no incremento de precios referenciados con cierre del 30 de junio del año en curso.
La medida arrojó una alerta: a todos los conductores que violen lo establecido o que se reciba una denuncia de la población, se procederá al retiro de su licencia operativa y su cancelación definitiva, precisó el funcionario.
En el foro Precios de los Boteros... ¿un mal necesario? publicado en Cubahora varios usuarios arrojaban puntos álgidos al debate. Joe se preguntaba: ¿Cómo es posible que esos carros, que muchos tienen más de 60 años, puedan seguir circulando, violando todas las normas posibles y sobornado a los del somatón? ¿Cómo es posible que declaren públicamente y sin el menor recato, que tienen que comprar el combustible en el mercado negro porque al precio del CUPET no da la cuenta?
Una cosa si estaba clara. Lo ratificó la Vicepresidenta del Consejo de la Administración Provincial en funciones de la Actividad de Fiscalización y Control, Isabel Hamze Ruíz: las condiciones no han cambiado para que se eleve el costo de la transportación de pasajeros debido a la estabilidad del precio del combustible en el país. Asimismo, las cuotas impositivas y los tributos que pagan los trabajadores por cuenta propia se mantienen como está establecido.
La Resolución No.353 del 2013 del Ministerio de Finanzas y Precios establece las cuotas mínimas mensuales que deben pagar los cuentapropistas por cada una de las actividades aprobadas. En el caso de las Actividades de Transporte de Carga y Pasajeros, hasta un cuarenta por ciento (40%) de los ingresos obtenidos. Para los vehículos que transportan hasta 6 pasajeros el mínimo es de 350 pesos cubanos, mientras que los que mueven de 6 a 15 personas la cifra asciende a 450.
El tema de la reducción del combustible en el sector estatal, una medida anunciada por Marino Murillo, detonó en que muchos boteros vieron como una de las fuentes para la obtención de combustible de manera ilegal podría disminuir. El forista Rey lo denunciaba: “hablan del robo, pero ¿son los boteros los que roban? No, los que roban son los que venden el combustible que se les asigna para la función social que representan”.
Medidas desde ambos lados. ¿Qué ocurre ahora?, preguntaba el forista Joe: “Las carreras largas se dividen en tres. Ellos no suben el precio pero acortan los tramos. Resultado: una carrera que antes costaba 10 pesos, ahora cuesta 30 o más, dependiendo de la distancia, con lo cual se están burlando descaradamente de las medidas oficiales, las cuales llegaron muy tarde y se quedaron cortas”, acotaba.
Por el otro lado, las llamadas al número 18820, establecido para que la población denuncie las irregularidades relacionadas con el alza de precio en los pasajes; y un grupo de inspectores en las calles fiscalizando el cumplimiento de las tarifas.
El Noticiero de Televisión informaba sobre otro de los impactos de las medidas para frenar las conductas de algunos boteros: el alza en cifras realmente altas de las ventas de diesel en los puntos de la Unión Cuba-Petróleo (CUPET). Una situación para la que están preparados estos establecimientos, como precisaron varios funcionarios.
Opiniones como la del forista Victor Yusniel demuestran las tantas aristas que ha destapado este tema: "Muy humana la decisión por parte de nuestro Gobierno de limitar la agresión de los famosos boteros a nuestro bolsillo. Es una lástima que haya que tomar estas medidas para arrancarle a esos choferes y ayudantes el gesto humano que todos debemos tener; porque si ellos pasan trabajo para conseguir las piezas y el mantenimiento, nosotros para conseguir el dinero del pasaje".
Esta historia por lo pronto no acabará. En su desenlace intervienen una serie de factores a los cuales habrá que dar solución a mediano y largo plazo. Aquí algunas de las claves para entender este complicado acertijo que va dejando muchas rutas:
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