La papa: búsqueda y captura

Para los que ya se habían resignado y accedieron a comprar la jaba de 10 libras en un CUC, el rumor es un hecho: llegó la papa.

Este semana los agromercados de la capital amanecieron con la sorpresa del tan esperado tubérculo que, en menos que canta un gallo, movilizó a cientos de personas en unas colas interminables, pero, eso sí, organizadas.

Desde entonces, una pareja de policías custodia y organiza las interminables colas que con el transcurso de la semana han ido mermando en conflictos y desesperación.

Hay papa de sobra, garantiza a la cola Juan Galarraga, vicepresidente del agromercado Mónaco del municipio Diez de Octubre. Esto no es por una semana, ni quince días, nos han confirmado que hay papa para este mes, el próximo y mucho más, afirmó a CubaSí Galarraga emocionado por su certeza.

Sin embargo, afuera la cola desconfía y se amontonan para garantizar el pase a las tarimas donde el dependiente cede a las peticiones de los clientes y flexibiliza la norma de 20 libras por persona.

Cuando tú entres, ellos te despachan lo que uno le pida, porque saben que no es fácil llegar hasta aquí, asegura uno de los ancianos en cola.

Pero la norma tiene una justificación que, si se viola, nos perjudica a todos. No eran pocos los que salían del agromercado con carritos y carretillas llenos de bolsas de 10 libras cada una que solo confirmaban la sospecha de los observadores: la reventa.

Un dependiente malhumorado aclara desde su tarima que no despacha más de dos bolsas de 10 libras a una misma persona, que si quieren 50 libras, él las despacha todas juntas, vocifera tras despachar 5 bolsas a su última compradora.

Y es que los revendedores aprovechan las debilidades de la venta “oficial” para hacer su agosto. En las mismas cercanías de los agromercados exhiben su mercancía a precios elevados para quienes no pueden esperar o quienes trabajan, pues aunque lo establecido es garantizar la venta hasta las 8 p.m., pocos comercios lo cumplen.

Lo cierto es que la llegada de la papa se ha convertido en los últimos años en todo un acontecimiento social, incluso en las redes sociales aparecen comentarios sobre las peculiaridades de su distribución.

Una amiga artemiseña escribió: la capital es tan "conflictiva" que necesita una norma de 20 libras de papa por pax, mientras que en San Antonio de los Baños y otros municipios de Artemisa –por cierto, la mayor productora de papa del país- son solo 10 por persona… ¿acaso a los habaneros les gusta más la papa?

Desde Santiago de Cuba comentan que la papa es muy rica, pero deben ver por dónde se les va, porque ya la venden en la calle a 15 pesos la libra, un dolor para el hombre trabajador.

Otros más animados publican: Logramos comprar papas!!! Policías mediante, broncas y hasta etcéteras.... habrá que tener en cuenta vender estos productos tan codiciados fuera del horario laboral...

El pasado dos de enero, medios oficiales anunciaron el inicio de la cosecha de papa en la provincia de Artemisa con destino al consumo social y al turismo, con una producción superior a las 120 mil toneladas.

Respecto al año anterior, donde solo se sembraron 483 hectáreas (ha), la campaña actual casi triplicó su presencia en los campos artemiseños con mil 337.9 ha.

El precedente negativo de la pasada cosecha sin dudas caldeó los ánimos de la población para la actual campaña, la cual tiene como principal reto eliminar la idea de búsqueda y captura y hacer que el tubérculo vuelva al menú de los cubanos, pues no es menos cierto que la papa ¡ayuda!