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miércoles, 27 de noviembre de 2024

La importancia de la detección temprana del VIH y los avances en el tratamiento (+ Video)

Aunque no existe una cura para el VIH, hay tratamientos antirretrovirales disponibles que pueden controlar la infección…

Alberto Jesús Quirantes Hernández
en Exclusivo 31/07/2023
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Virus- VIH
El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) ataca el sistema inmunitario y debilita las defensas. La fase más avanzada de la infección por el VIH es el síndrome de inmunodeficiencia adquirida

El VIH, o Virus de Inmunodeficiencia Humana, es un virus que ataca al sistema inmunológico del cuerpo humano, específicamente a los glóbulos blancos conocidos como linfocitos T CD4+. Este virus debilita gradualmente el sistema inmunológico, lo que puede llevar a la aparición de enfermedades oportunistas y complicaciones graves. Se transmite principalmente a través de ciertos fluidos corporales, como la sangre, el semen, los fluidos vaginales y la leche materna. Las formas comunes de transmisión incluyen relaciones sexuales sin protección con una persona infectada, compartir agujas o jeringas contaminadas, o de madre a hijo durante el embarazo, el parto o la lactancia materna.

Cuando una persona se infecta con el VIH, puede pasar por una fase aguda inicial en la que puede experimentar síntomas similares a los de la gripe, como fiebre, dolor de garganta, fatiga y erupción cutánea. Después de esta fase aguda, el virus puede entrar en una etapa crónica asintomática, en la que la persona puede no presentar síntomas durante muchos años.

Sin embargo, si no se trata, el VIH puede progresar a la etapa del SIDA o Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida, que es el estadio más avanzado de la infección por VIH. En esta etapa, el sistema inmunológico está gravemente dañado y la persona es susceptible a infecciones oportunistas y ciertos tipos de cáncer.

Aunque no existe una cura para el VIH, hay tratamientos antirretrovirales disponibles que pueden controlar la infección y ayudar a las personas con VIH a llevar una vida larga y saludable. Estos medicamentos pueden reducir la carga viral en el cuerpo, fortalecer el sistema inmunológico y disminuir el riesgo de transmisión a otras personas.

La prevención del VIH incluye el uso de preservativos en las relaciones sexuales, evitar compartir agujas o jeringas y recibir pruebas regulares de detección del VIH, especialmente si se está en una situación de riesgo. La educación y la concienciación sobre el VIH también son fundamentales para reducir la propagación del virus y eliminar el estigma asociado a la infección por VIH.

 

LA IMPORTANCIA DE LA DETECCIÓN TEMPRANA DEL VIH Y LOS AVANCES EN EL TRATAMIENTO

La detección temprana del VIH es de suma importancia, ya que permite iniciar el tratamiento lo antes posible. Cuanto antes se detecte la infección por VIH, antes se puede comenzar con la terapia antirretroviral, lo cual tiene varios beneficios:

Control de la infección: La terapia antirretroviral ayuda a suprimir la replicación del virus en el cuerpo, lo que disminuye la carga viral y permite que el sistema inmunológico se recupere. Esto ayuda a prevenir la progresión del VIH hacia el SIDA y reduce el riesgo de desarrollar enfermedades oportunistas.

Mejora de la calidad y esperanza de vida: El tratamiento adecuado y oportuno permite a las personas con VIH llevar una vida más saludable y prolongada. La terapia antirretroviral puede controlar la infección durante muchos años, permitiendo a las personas vivir una vida activa y productiva.

Reducción del riesgo de transmisión: Las personas que reciben tratamiento antirretroviral y mantienen una carga viral indetectable tienen un riesgo extremadamente bajo de transmitir el virus a sus parejas sexuales. Esto se conoce como "indetectable igual a intransmisible" (I=I). Es decir, una carga viral indetectable hace que el VIH no sea transmisible sexualmente.

AVANCES EN EL TRATAMIENTO

En cuanto a los avances en el tratamiento del VIH, ha habido importantes desarrollos en los últimos años:

Terapia antirretroviral más eficaz y tolerable: Los medicamentos antirretrovirales actuales son más efectivos y tienen menos efectos secundarios en comparación con los regímenes anteriores. Estos medicamentos pueden reducir la carga viral a niveles indetectables y mejorar la salud general de las personas con VIH.

Tratamiento simplificado: Se han desarrollado combinaciones de fármacos en un solo comprimido, lo que facilita el cumplimiento del tratamiento y mejora la adherencia. Esto es especialmente importante, ya que el cumplimiento estricto del tratamiento es crucial para el éxito a largo plazo.

Profilaxis pre-exposición (PrEP): La PrEP consiste en tomar medicamentos antirretrovirales antes de la exposición al VIH para prevenir la infección. Esta estrategia ha demostrado ser altamente efectiva en reducir el riesgo de adquirir el VIH en personas que están en alto riesgo de contraerlo, como parejas serodiscordantes y personas que se inyectan drogas.

Investigación sobre la cura del VIH: Aunque todavía no hay una cura para el VIH, se están realizando investigaciones y ensayos clínicos en busca de una cura funcional o esterilizante. Se están explorando enfoques como la terapia génica, la inmunoterapia y el uso de medicamentos que pueden eliminar o controlar el virus en el cuerpo.

Es importante destacar que, a pesar de los avances en el tratamiento, la prevención del VIH sigue siendo fundamental. Promover prácticas sexuales seguras, el uso de preservativos y la educación sobre el VIH siguen siendo estrategias clave para reducir la propagación de la enfermedad.

 


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Alberto Jesús Quirantes Hernández

Profesor Consultante y Jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Docente Dr. Salvador Allende en La Habana, Cuba.


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