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miércoles, 27 de noviembre de 2024

Por qué es necesario aprender a dominar nuestras emociones (+ Video)

El adecuado manejo de las emociones consigue, en mayor o menor medida, el logro exitoso de distintos aspectos de nuestra vida…

Alberto Jesús Quirantes Hernández
en Exclusivo 23/05/2022
1 comentarios

El control de nuestras emociones también suele conocerse como gestión emocional o gestión de las emociones y forma parte de la llamada inteligencia emocional; consiste en ser conscientes de las emociones que sentimos, aceptarlas y, además, controlarlas en caso de ser necesario, adaptándonos al medio donde nos hallemos. Este control se puede mejorar mediante un adecuado aprendizaje.

La sociedad actual estima las emociones como algo irracional y enemigas de la razón. Eso lleva a muchas personas a despreciar ese lado emocional de uno mismo, considerándolo como debilidad y difícil obstáculo contra el fin de alcanzar nuestras más caras ambiciones y superarnos como personas.

Las emociones son inevitables, pero si conseguimos desarrollar el manejo de las nuestras y las de los demás lograremos que trabajen a favor de nuestros intereses y aspiraciones, y no en contra de ellos.

El adecuado manejo de las emociones consigue, en mayor o menor medida, el logro exitoso de distintos aspectos de nuestra vida, como puede ser el de las relaciones interpersonales, el trabajo, la prosperidad y muchos otros más.

QUÉ ES LA INTELIGENCIA EMOCIONAL

Es un proceso que incluye tanto el conocimiento de las emociones propias y cómo regularlas a nuestro favor, como el de las emociones ajenas. Este conocimiento emocional de uno mismo es el principio del dominio de las emociones pues sin saber lo que sentimos y cómo nos afectan sería imposible dominarlas.

Debemos aceptarnos tal como somos, aunque haya aspectos de nuestra vida que no nos gusten o nos cuesta ver como algo positivo. Las emociones son normales y todos las sentimos, teniendo en cuenta que cualquiera puede equivocarse porque es parte de la vida.

Hay que centrarse en los pensamientos positivos sin darle un papel principal a los negativos pues ellos provocan una gran carga y todo lo dificultan, por eso debemos tratar de evitarlos. Aunque no es lo adecuado mirar para otro lado y hacer como que no existen. Quien ya ha descubierto las emociones que siente, entonces debe analizarlas, concentrarse en las emociones positivas, y las negativas dejarlas pasar, otorgarles el valor que les corresponde sin solazarse en ellas.

Para lograr esto cada cual debe poner de su parte. En la gestión emocional existe un elemento que muchas veces se pasa por alto y es la voluntad. Para controlar las emociones debemos tener una actitud positiva a través de acciones volitivas, porque no siempre es fácil dominarlas de manera espontánea.

UNA RETIRADA A TIEMPO

La actitud positiva es solo una parte del control de nuestras emociones porque ellas habitualmente ocurren porque un estímulo externo las desencadena. Quien aspire a conocer la inteligencia emocional se dará cuenta de que a veces la mejor opción es no mantenerse en la zona del problema y tomar la decisión de retirarse a tiempo. Por ejemplo, si alguien nos está provocando, darse la vuelta y marcharse es una decisión emocionalmente correcta y astuta.

ACEPTAR LAS CRÍTICAS

Un malestar emocional tal vez provenga de no saber aceptar las críticas y estar demasiado pendiente de lo que los demás piensan de uno. Aprender a admitirlas cuando son fundamentadas y llenas de buena fe es necesario para ser emocionalmente equilibrado.

EL DEPORTE LIBERA TENSIONES

Encontrarse más calmado después de liberar las tensiones se consigue gracias al ejercicio físico. Practicar deporte es una de las opciones más saludables a nivel físico y a nivel psíquico. El ejercicio físico nos ayuda, por ejemplo, a reducir el estrés o aumentar la autoestima. Por lo tanto, según edad y estado de salud, quien desee mantener su equilibrio emocional se debe incorporar a cualquier actividad física sistemática.

ESCUCHAR ACTIVAMENTE

El lenguaje verbal es aproximadamente un 30 % de lo que comunicamos. El resto es lenguaje no verbal o gestual. Y como muchas veces se oye pero no se escucha, pues se está más concentrado en lo que vamos a decir nosotros que lo que la otra persona está diciendo, tanto con su lenguaje verbal como con el extraverbal, quien aspire a entender mejor las emociones de los demás, por supuesto para su conveniencia, debe practicar la escucha activa tanto de lo que se nos dice en su forma verbal como en la no verbal.

BENEFICIOS DEL DOMINIO EMOCIONAL

Uno de sus beneficios es prevenir formas inadecuadas de gestionar el estrés o la ansiedad,  como son consumir drogas, comer sin hambre, etc. También facilita adaptar la conducta según el estado emocional de personas convenientes para nosotros, da mayor poder de concentración y no deja sucumbir ante las distracciones, todo lo cual facilita la concentración en las tareas que deben ser realizadas sin demora; también otorga mayor capacidad de mantener una autoestima saludable sin dejar que la afecte el pesimismo, facilidad para detectar e identificar las emociones y saber cómo canalizarlas y mayor pericia a la hora de aprovechar el componente motivacional de las emociones de los otros para usarlas a nuestro favor.


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Alberto Jesús Quirantes Hernández

Profesor Consultante y Jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Docente Dr. Salvador Allende en La Habana, Cuba.

Se han publicado 1 comentarios


Luis
 29/5/22 11:07

Lo voy a tener en cuenta

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