Estampas: un Moncada de estos tiempos

Este 26 de julio no hay provincia sede ni tampoco se realizará el tradicional desfile, pero tampoco faltará el entusiasmo y la rebeldía que inspiran estos días: las banderas ondearán desde casa. Hace más de cuatro meses, la pandemia de la COVID-19 llegó al país y desde entonces nos ha exigido reinventarnos, crear, innovar…

A 67 años de aquel heroico 1953, las ideas y el espíritu que impulsaron el Asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes sigue marcando el rumbo en Cuba. Por eso, este Día de la Rebeldía Nacional cada uno lo celebrará en su propia trinchera: desde la ciencia, salvando vidas, cultivando la tierra de sol a sol, como voluntarios en los hospitales, en la fábrica, educando o quedándose en casa. Los contextos cambian, el escenario de lucha también, el objetivo sigue siendo el mismo: ganar, por Cuba.

Este 26 de julio no hay provincia sede ni tampoco se realizará el tradicional desfile, pero tampoco faltará el entusiasmo y la rebeldía que inspiran estos días. (Rodolfo Blanco Cué/ACN)

El legado del 26 de julio de 1953 convoca, exhorta, nos llama al combate, en tiempos nada fáciles y llenos de obstáculos (Ariel Ley Royero/ACN)

Producir y distribuir alimentos es una de las prioridades en el contexto actual cubano (Oscar Alfonso Sosa/ACN)

Este nuevo escenario provocado por la COVID-19 nos exige reinventarnos, crear, innovar, crecer. (Ariel Ley Royero/ACN)

La idea se ha reforzado en estos meses, ya nadie lo duda: Cuba salva vidas (Arelys María Echevarría/ACN)

A 67 años de los hechos del 26 de julio, la esencia sigue siendo la misma: impulsar los motores pequeños, que echarán a andar al motor grande (Armando Ernesto Contreras/ACN)

La educación en Cuba, en medio de este contexto, no se ha detenido: es una prioridad (Juan Pablo Carreras/ACN)