“Uno de los temas clave de nuestra época es el cambio climático, y no hay tiempo que perder. Si no actuamos ahora, pagaremos un precio muy alto, no tenemos un plan B, porque no existe un planeta B”, señalaba este domingo el Secretario General de Naciones Unidas Ban Ki Moon, durante una multitudinaria marcha en Nueva York para exigir un compromiso para combatir el calentamiento global.
No pocos medios de comunicación repitieron una y otra vez esta idea, como también se han convertido en titulares mediáticos las diversas intervenciones de mandatarios latinoamericanos que abogaron por un planeta más sostenible, durantela Cumbre sobre Cambio Climático 2014.
Más de un centenar de Jefes de Estado o de Gobierno, científicos y representantes de la sociedad civil y del sector privado participaron en esta Cumbre, con el objetivo de sentar las bases para lograr el año próximo un convenio climático global.
LATINOAMÉRICA POR UNA ECONOMÍA MÁS VERDE
“Necesitamos soluciones estructurales a la crisis climática, así como medidas inmediatas para hacer frente al impacto de estos fenómenos extremos”, este fue el llamado del presidente de Bolivia, Evo Morales, durante la Cumbre.
El mandatario llamó a tomar "acciones inmediatas" para frenar el cambio climático, debido a las "graves consecuencias que está dejando el calentamiento global en la Madre Tierra".
"La tierra y el ecosistema son nuestro hogar, y estamos convencidos de que en el equilibrio entre nuestras necesidades y el respeto a la madre tierra prolongará una vida mejor en el planeta”.
Morales enfatizó que los países desarrollados deben asumir compromisos de mitigación sólidos y ambiciosos con objetivos cuantificados para limitar y reducir las emisiones de carbono.
Asimismo, refirió su profunda decepción por los países desarrollados que no son parte del protocolo de Kioto, que se han retirado o que no han ratificado el segundo periodo de compromisos.
“La ausencia de ratificación de cualquier país desarrollado sobre un compromiso de carácter vinculante, plantea ciertas dudas sobre su credibilidad y sinceridad en la lucha contra el cambio climático (...) Instamos a todas las partes del protocolo de Kyoto a revisar y aumentar la ambición de sus objetivos de compromiso para el segundo periodo”, enfatizó.
Por otra parte, el presidente de México, Enrique Peña Nieto, destinó cerca de 10 millones de dólares al Fondo Verde de la ONU, para frenar los embates del calentamiento global.
"Si bien México es un emisor moderado de gases de efecto invernadero, nuestro compromiso internacional es firme y creciente”.
Peña Nieto dijo que en el país se impulsan iniciativas para lograr una baja economía de carbono, por lo que planteó crear una arquitectura financiera del régimen climático Post-2020, que fortalezca a las instituciones existentes como el fondo para el medio ambiental y los fondos de inversión climática, "particularmente el Fondo Verde para el Clima".
Otra de las mandatarias que también alzó su voz fue DilmaRouseff, quien destacólos logros alcanzados por su país en la reducción de los efectos del cambio climático y la preservación de los recursos naturales.
En su intervención, la jefa del Estado brasileño expresó que Brasil ya está trabajando en un acuerdo para combatir el cambio climático propicio para el desarrollo sostenible, y que en los últimos años se han logrado resultados favorables y se han disminuido las emisiones de carbono de 66 a 39 por ciento hasta el 2020.
Además, informó que su nación ha tomado medidas decisivas con respecto a la deforestación, ya que se ha reducido en un 70 por ciento"
La mandataria llamó también a fomentar la energía renovable y tener agricultura baja en emisiones de carburo. "Presentaremos a nuestros ciudadanos brasileños un plan para combatir el cambio climático y revertir la lógica de que combatir el cambio climático es nocivo para el crecimiento económico", fomentando nuevas políticas de desarrollo sostenible”.
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, hizo el compromiso de que en 2025 el 45 por ciento de la energía producida en Chile será renovable.
Bachelet señaló que en los próximos 20 años, con una inversión cercana a 250 millones de dólares con apoyo internacional, Chile podría duplicar su superficie de deforestación con especies nativas y "podríamos alcanzar un millón de hectáreas en recuperación de bosques nativos hacía el año 2035".
Una vez más se alzó la alerta del presidente venezolano Nicolás Maduro, quien añadió que todos los factores que inciden en la destrucción del planeta avanzan de manera acelerada sin tomar las medidas de control ambiental.
Maduro recordó que "el 20 por ciento de los países más ricos del mundo consumen 84 por ciento de los recursos naturales mundiales", y en este sentido, dijo que "la naturaleza nos da signos claros del estado de gravedad" en que se encuentra.
Durante su intervención, el mandatario ratificó el compromiso de Venezuela con el desarrollo ecológico sostenible: “Venezuela sostiene 70 por ciento de su demanda de energía con la hidroeléctrica y posee en 60 por ciento de su territorio más de 22 áreas protegidas, preservando 58 millones de hectáreas de bosque incluyendo parques, reservas de biósfera y fauna”, indicó.
La conservación de los bosques venezolanos se traducen en un ahorro de emisiones de 12 mil 221 millones de toneladas de CO2, logrando disminuir la pérdida de bosques en más del 50 por ciento, agregó.
Una vez más, todos coincidieron en la necesidad de avanzar hacia un cambio para salvar el planeta, posiciones como estas ya las habíamos visto antes, pero el tiempo apremia, aunque muchos sigan sin entender que para el planeta no hay un plan B.
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