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lunes, 25 de noviembre de 2024

Apasionada por el cine (+Fotos) (+Video)

Virginie Feira es considerada una de las comediantes cimeras de la cinematografía gala...

Ada María Oramas Ezquerro en Exclusivo 22/05/2012
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La Chance de ma vie - Cartel
Cartel de la película "La oportunidad de mi vida"

La actriz francobelga Virginie Efira ha realizado su gran sueño de encontrar un lugar muy importante en la cinematografía francesa, con siete largometrajes, seriales para televisión y una intensa labor como conductora de ese medio, con un previo fogueo en las escenas de Bruselas y París.

En el personaje de Joanna conquistó las simpatías del público que ha presenciado el filme La chance de ma vie (La oportunidad de mi vida), dirigida por Nicolas Cuche, una comedia que provocó muchas risas y carcajadas en las salas de La Habana y de todo el país, y que ha acaparado la popularidad de los miles de espectadores que presenciaron el 15 Festival de Cine Francés, el cual parece haber sobrepasado las cifras de la edición anterior.

-¿Cuándo comenzó usted su carrera actriz?

-Era casi una niña, apenas tenía seis años. Fui seleccionada para leer un poema en un acto de la escuela. Fue algo fascinante para mí sentir que me dedicaban atención, pues mis compañeritos se habían convertido en público. Por aquel entonces solo era capaz de sentirme feliz. Por eso, empecé a colaborar con la maestra y con la escuela y preparé pequeños espectáculos; después fueron historias representadas de forma muy sencilla, fiestas de disfraces y actos colectivos donde era necesario transmitir mensajes educativos. Me encantaba ir al cine y presenciar películas donde creía formar parte de las historias que aparecían en pantalla.

-¿A qué edad debutó en el cine?

-Demasiado tarde a mi juicio, pues a los 28 años filmé mi primera película. Sin embargo, mi carrera como actriz tuvo un inicio mucho más temprano, en mis primeros años de adolescencia, después de haber estudiado teatro en Bélgica, comencé a actuar en teatro y en televisión, en Bruselas y París. Entonces, comencé a temer que la televisión obstaculizara de alguna forma mi carrera como actriz.

-¿Cómo pudo alternar su labor en la televisión y en el cine?

-No la he alternado por mucho tiempo. En realidad, mis temores se hicieron realidad y debí tomar una resolución irrevocable, al menos por ahora. No me alcanzaba el tiempo cuando empecé a hacer cine de un modo más constante. Y abandoné la televisión, en 2009, por mi amor al cine.

-¿Cuántas películas conforman su filmografía?

-Son pocas en realidad, solo son siete, pero constituyen lo más importante de mi vida artística.

-¿Cuál género prefiere usted abordar?

-No prefiero uno exactamente. Me interesan los argumentos, la ingeniosidad y el nivel artístico de la puesta en pantalla. Pero reconozco que adoro la comedia. Valoro mucho ser una actriz de comedia. Hay quienes menosprecian este género, por considerarlo menor, casi como si fuera sucio. Yo pienso todo lo contrario y me agrada enormemente la comedia, sobre todo la romántica. Existen actrices que prefieren otro tipo de películas, de esas que tienen una escritura que posee un lenguaje más íntimo y conceptual, pues muchas personas poseen estereotipos mentales acerca de la comedia y la consideran superficial y banal. Yo pienso todo lo contrario. He protagonizado comedias, pero prefiero las románticas, porque coinciden con mi temperamento

-¿Y en cuanto a los filmes dramáticos?

-El disfrute mío al interpretar una comedia no ha sido óbice para que haya actuado en un cine dramático, de ese que se considera algo bello, diferente; he trabajado en largometrajes dramáticos y también he recibido grandes satisfacciones. Por eso no podría decir que prefiero un género determinado. Amo el cine en toda la amplitud de los géneros, tendencias y posibilidades que abarca.

-¿Está involucrada en algún nuevo proyecto cinematográfico?

-En estos momentos estoy filmando un largometraje en París, que se titula Grandes diferencias, por el momento. Cuenta una historia de amor entre una mujer de mi edad, que siente un gran temor de ser abandonada, y un joven de 19 años. La dirige un joven actor que lleva dos años dirigiendo la Commédie Francaise y lo hace muy bien. Por cierto, acaba de obtener un premio César por su más reciente filme, y se llama Pierre Ninet.

-¿Un proyecto algo más lejano?

-Después interpretaré a la esposa de Francois Cluzet, en el filme titulado ¿Quién teme jugar con su esposa?

-¿Y en cuanto a regresar al teatro?

-Me encantaría actuar en una obra de carácter experimental, pero ese tipo de teatro requiere dedicarle mucho tiempo. Y por el momento me dedico enteramente a filmar para cine. Es un medio que valoro mucho.

-¿Existe algún otro arte que atraiga su atención, por ejemplo la pintura?

Mi hermano es pintor. Y admiro mucho su arte. Sus obras son figurativas, muy fuertes en cuanto al impacto que provocan en el espectador y poseen gran belleza, pero ese es su campo. Me siento atada al arte de mi hermano, soy algo así como su representante, en mis momentos libres, pero no intento pintar, porque no tengo esa sensibilidad que aprecio en mi él.

-¿Qué opina acerca del Festival de Cine Francés que está a punto de concluir?

-Christophe Barratier me invitó y me sentí muy complacida, porque ya conocía este evento, pues había asistido en 2008 y recibí una impresión muy fuerte, inolvidable. Pienso que es un lugar que posee una belleza alucinante, un pueblo muy acogedor, y sentía grandes deseos de regresar. Y cuando Christophe me invitó, le respondí afirmativamente, con gran entusiasmo, por cierto, más aún por representar a la comedia Le chance de ma vie (La oportunidad de mi vida), porque el intercambio que propicia el festival es apasionante.

-¿Cómo valora la acogida de los espectadores a este filme?

-Ha sido una experiencia muy grata para mí poder apreciar tras la proyección una respuesta inmediata en los espectadores. El hecho de salir del cine y compartir sus impresiones, haber escuchado sus risas en determinadas escenas, conocer sus criterios, ha sido memorable y, sobre todo, comprobar que se han divertido y que la película les ha gustado y han comprendido y respondido a las claves de su humor. Charlar con ellos y comprobar su sinceridad respecto a su disfrute me ha proporcionado una gran satisfacción, escuché opiniones muy favorables sobre la película que me hicieron sentir gran satisfacción, al punto que me agradaría mucho regresar al próximo festival.


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Ada María Oramas Ezquerro

De larga trayectoria en el periodismo cultural. Premio de Oro, del Gran Teatro de La Habana y Miembro de la sección de la Asociación de Artistas Escénicas de la UNEAC


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