Cuando ya se vislumbran las elecciones legislativas marcadas para el último trimestre de este año (en principio, entre el 22 de noviembre y el 6 de diciembre), la conspiración global contra la Revolución Bolivariana ataca ahora mediante la manipulación mediática triangulada entre Estados Unidos, España y Venezuela, al presidente del Parlamento Nacional Diosdado Cabello, por supuestos vínculos con el narcotráfico regional.
Los conspiradores mediáticos, devenidos partidos que sustituyen a las endebles organizaciones opositoras venezolanas, se han unido en un frente para distraer la atención del electorado sobre una de las figuras políticas más prominentes de la nación suramericana, ya que a su cargo en la Asamblea Nacional se agrega que es el vicepresidente primero del Partido Unido de la Revolución Socialista (PSUV), la fuerza movilizadora más importante del país.
De cómo se proyecte el gobierno del presidente Nicolás Maduro, las medidas que tome en lo que resta de ahora a los comicios, de cómo se vayan resolviendo los problemas de desabastecimiento y otros planes desestabilizadores en marcha dependerá en buena medida el resultado electoral. Los revolucionarios venezolanos tendrán que, de manera inteligente, manejar los nuevos escenarios, pues perder la mayoría en la Asamblea Nacional no sería el fin de la Revolución, pero sí un obstáculo de difícil sorteo.
La contrarrevolución manejada por Estados Unidos se ha lanzado en un vale todo contra el proceso iniciado por el fallecido presidente Hugo Chávez Frías en 1999 y seguido por Maduro y un equipo de colaboradores, entre ellos los representantes de las Fuerzas Armadas Bolivarianas que han jurado lealtad al llamado Comandante Eterno y su obra, creando una poderosa unión cívico-militar.
No obstante, es innegable el daño político e ideológico que la actual campaña contra Cabello puede hacerle a los líderes revolucionarios —pues aún hay personas que creen o dudan ante esas falacias—, por lo cual ya está en marcha un contra plan oficialista para desmantelar la ofensiva derechista, que, según se conoce, intentará, una vez más, desestabilizar el país con nuevos planes de violencia callejera a partir de la próxima semana.
De manera repetida, estos medios, que tratan de debilitar la Revolución usando las más denigrantes astucias amarillistas, recordaron que Cabello está supuestamente incluido en la Lista Clinton (oficialmente Specially Designated Narcotics Traffickers o SDNT list).
Esta es una relación de empresas y personas que Estados Unidos considera están relacionadas con dineros procedentes del narcotráfico internacional. Fue creada en octubre de 1995 por la Orden Ejecutiva 12978 del expresidente William Clinton, con el argumento de frenar las drogas y el lavado de activos.
Medios de Estados Unidos, como The Wall Street Journal y la CNN, El País y ABC de España, que replican a sus pares venezolanos o a la inversa, se hacen eco de supuestas “investigaciones por tráfico de drogas y lavado de dinero” que realizan fiscales federales de Estados Unidos y la agencia antinarcóticos DEA (siglas en inglés) sobre uno de los políticos venezolanos más relevantes.
Esos medios, que responden a los monopolios de la comunicación, realizan una acción sincronizada sobre la supuesta relación de Cabello con el llamado Cartel de los Soles, de Medellín, Colombia, pero sin presentar una foto o un documento probatorio.
El diario The Wall Street Journal precisó este lunes que la justicia estadounidense “lleva años investigando a altos funcionarios en Venezuela bajo la sospecha de que han convertido al país en un centro global de tráfico de cocaína y blanqueo de capitales” limitándose a citar “fuentes anónimas” para tan graves acusaciones, lo cual las invalida ante la opinión pública.
Sin embargo, el periódico insiste en que “hay grandes pruebas” contra el líder parlamentario, pero sin mostrar una sola.
ABC, diario de la monarquía española, publicó por su parte una propaganda dirigida a exaltar la figura de Leamsy Salazar, un ex escolta de Cabello que desertó y se radicó en Estados Unidos, desde donde atacó a su antiguo jefe.
Esta pieza de la propaganda mediática derechista fue reproducida, sin verificar su veracidad —regla de oro del periodismo— por las corporaciones mediáticas El Nacional y Tal Cual, y el portal web La Patillaen Venezuela.
Poco después, el semanario venezolano Quinto Día —del 17 al 24 de abril de 2015— confirmó en su contraportada que “definitivamente no prosperó la denuncia contra Diosdado Cabellos en Estados Unidos. El informe del vocero gubernamental Jim Luers advirtió que “las acusaciones de un militar de la armada que pidió refugio (Salazar), resultaron totalmente falsas”, noticia que, salvo El Universal, fue silenciada por los medios monopólicos del país.
En defensa del falsamente acusado, el diputado Earle Herrera dijo el pasado martes que en ninguna Fiscalía de Estados Unidos se ha abierto algún procedimiento contra Cabello ni otro funcionario venezolano. Herrera denunció que la campaña mediática contra el presidente del Parlamento tenía como propósito atacar la institucionalidad democrática de Venezuela.
CABELLO RETA A SUS ENEMIGOS
Los planes de descrédito contra Diosdado Cabello comenzaron en enero pasado y las primeras llamadas “noticias” partieron desde Washington.
El presidente del Parlamento retó a los medios de prensa internacionales y venezolanos a presentar una única prueba en su contra y ratificó que levantó acciones penales en contra de los medios nacionales en los tribunales nacionales competentes.
“Jamás pasaría por nuestras mentes meternos en algo que le cause daño a los jóvenes de Venezuela o del mundo, creemos en el hombre y la mujer nueva”, expresó el vicepresidente primero del PSUV tras recibir el apoyo de sus colegas parlamentarios ante las continuas agresiones mediáticas en que se ha visto envuelto.
“Los que me acusaron durante años de ser dueño de la mitad de Venezuela o del mundo, los reto y los sigo retando a que encuentren cualquier lugar de Venezuela o el mundo que sea de Diosdado Cabello”, refirió el dirigente, quien instó también a los políticos opositores a tener una conducta como la suya. “Yo quisiera saber, puntualizó, cuánta gente de la oposición puede decir eso”.
El dirigente legislativo no está solo en su enfrentamiento contra los monopolios de la información. Los primeros en apoyarlo fueron los integrantes de la mayoría revolucionaria del Parlamento.
También el presidente Maduro orientó una campaña nacional e internacional “para derrotar las infamias que pretenden socavar el proceso de transformación que vive el país desde 1999, pues Venezuela posee la reserva moral para neutralizar las arremetidas contra cuadros de la Revolución Bolivariana como Diosdado Cabello”.
En su programa En Contacto Con Maduro indicó que se reuniría con un grupo de comunicadores “para diseñar una campaña contra los planes de injuria contra Cabello y otras figuras como el actual gobernador de Aragua, Tareck El Aissami, y otros cuadros de la Revolución Bolivariana y de Venezuela”.
El mandatario hizo un llamado “a los movimientos sociales, al gran pueblo patriótico, a la juventud, mujeres, clase obrera, y al PSUV a apoyar esta campaña, porque quien se mete con Diosdado, se mete con nosotros; vamos a defenderlo como defendimos nuestro país ante la agresión de Estados Unidos el pasado 9 de marzo”, cuando el presidente Barak Obama firmó una orden ejecutiva que declaraba a Venezuela una amenaza a su seguridad nacional.
NUEVAS AGRESIONES DE LA OPOSICIÓN
Este jueves, en declaraciones a Venezolana de Televisión, Cabello advirtió que se preparan disturbios callejeros para el próximo martes, según se conoció en una reunión efectuada en el Aula Magna de la Universidad Central de Venezuela (UCV).
Los dirigentes estudiantiles opositores Hasler Iglesias y Sairam Rivas acordaron esas movilizaciones encaminadas a destruir la paz, acciones que se extenderían a otros centros universitarios del país, según denunció en la cadena televisiva.
Para el pueblo venezolano aún están presentes las llamadas guarimbas de febrero del 2014, realizadas con apoyo del exterior —incluso mercenarios llegados de Colombia— que dejaron un saldo de 43 fallecidos y más de 800 heridos.
La situación en Venezuela, quinto exportador petrolero del mundo y líder de la integración política y socioeconómica en América Latina desde una posición de solidaridad, es harto delicada este año en que sus enemigos harán lo imposible para ganar las legislativas.
Tanto el presidente Maduro como su equipo de gobierno, las instituciones parlamentarias, jurídicas y otras, con el apoyo de una mayoría revolucionaria, llevan 16 años en una histórica cruzada antiimperialista, resistiendo —como lo hace Cuba desde hace casi seis décadas— los ataques furibundos de los antisocialistas, que cada día inventan nuevas formas de guerra (económica, psicológica, mediática) para destruir los proyectos socialistas del siglo XXI.
Términos y condiciones
Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social. Recomendamos brevedad en sus planteamientos.