Un fructífero debut signó hoy la escuadra cubana de boxeo en los Juegos Olímpicos de Londres, cuando el mosca Robeisis Ramírez se deshizo cómodamente 19-7 del (casi) desconocido japonés Katsuaki Susa.
Realmente, sobre el cuadrilátero de la Arena Excel hubo un solo hombre. Y ese fue el cienfueguero, titular de los I Juegos Olímpicos de la Juventud y monarca juvenil del orbe, quien fue ampliamente superior a un rival carente de ABC boxístico, cuyo mejor aval constituye un tercer lugar en el torneo asiático de 2010.
Robeisis lo apabulló en las tres distancias, ganándole los tres asaltos. A saber, lo mantuvo a raya con su jab de derecha y consiguió combinarlo con varios de sus letales golpes de izquierda, tanto de rectos como swinnes, totalmente indescifrables para el nipón.
En el primer round, Ramírez salió airoso 5-2, pero luego apretó su ataque y ganó los dos restantes con puntuaciones de 7-2 y 7-3. El cienfueguero también supo bloquear con sus antebrazos las escasas acometidas de Susa, que fue requerido en varias ocasiones por pegar con el guante abierto y meter la cabeza.
Este martes escalarán al ring dos púgiles cubanos. El ligero welter Roniel Iglesias, bronce en Beijing y único que repite ahora de aquella escuadra, enfrentará al colombiano César Villarraga, en tanto el minimosca Yosbany Veitía lo hará ante el australiano Billy Ward. Ambos salen como favoritos para imponerse.
Cuba asiste con ocho representantes a este torneo boxístico olímpico, en pos de mejorar la pálida actuación rubricada hace cuatro años en Beijing, donde no pudo conseguir medallas de oro y la cosecha fue de cuatro preseas de plata e igual cantidad de bronces.
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