Con un excelente partido del opuesto José Miguel Gutiérrez, la selección masculina cubana dispuso 3-1 (19-25, 25-18, 25-22 y 25-21) del poderoso cuadro de Alemania, al iniciarse este miércoles la segunda parada de la Liga de Naciones de Voleibol, con sede en Belgrado, capital de Serbia.
Por demás, destacar que el elenco debió solventar, con fuerza y mucha decisión sobre el mundoflex, el hándicap del arribo a la ciudad europea de ocho jugadores -varios claves en la alineación regular-, apenas unas horas antes del inicio del duelo.
Sin quitarse "el polvo del camino", se enrolaron en un partido que exhibió una fructífera remontada del elenco que conduce el técnico Jesús Cruz, pues con varios errores no forzados y escaso trabajo en el vital renglón del bloqueo, cedieron ante el empuje de los anfitriones en el primer y único set del juego.
Pero a partir de ahí, los talentosos jugadores de la Isla, emplantillados en varios clubes de las mejores ligas del mundo, se llamaron a capítulo y, como Ave Fénix, apareció el atacador de esquina Gutiérrez.
Es cierto que el voly constituye un deporte colectivo, en el cual "una golondrina no hace verano". Pero siempre hay un héroe que se echa el equipo encima. Y si otros jugadores le apoyan, el trámite hacia el éxito se hace más factible.
Gutiérrez pidió muchísimas pelotas en los tres sets restantes, y bien "enlazado" con el pasador Julio Gómez -que supo repartir balones por diversas zonas, en especial la tres-, dejó caer una gran cantidad en cancha rival.
El atacador de esquina totalizó 20 puntos, 19 en el ataque y uno en el servicio. Con dobles dígitos también terminaron el opuesto José Massó (14/12-1-1), el central Javier Concepción (11/8-3-0) y el atacador-auxiliar Marlon Yant (11/8-2-1), este último líder anotador del torneo durante la primera semana, con sede en Río de Janeiro y donde Cuba logró pálido saldo de tres derrotas y apenas un triunfo.
Colectivamente los cubanos fueron mejor en el ataque (51-49), servicio (7-2) y en un acápite que los viene acechando torneo tras torneo: el de errores propios.
En este duelo contra los germanos, la escuadra de Cruz cometió 25 -cifra aún bien elevada-, pero el rival les concedió 28. Los europeos apenas fueron mejores en bloqueo (10-8).
Con este triunfo, Cuba ascendió del lugar 15 al 12 y lucha por conseguir su objetivo de quedar entre los ocho mejores que accederán a la final de esta Liga de Naciones 2025, en pos de mejorar el noveno escaño conseguido en la edición anterior.
Cuba enfrentará hoy al local elenco de Serbia.
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