El país inicia la zafra correspondiente a la temporada 2013-2014 con la puesta en marcha del central Comandante Manuel Fajardo, de Quivicán, provincia Mayabeque, el primero de otros cuarenta y nueve que se incorporarán a la molienda. Con una cifra similar a la del año anterior, AZCUBA intentará llegar a la cifra de 1 millón 800 mil toneladas de azúcar. De cumplirse, se lograría un crecimiento del 18 % (200 mil toneladas más) con respecto al año anterior y sería la mejor zafra de la última década.
La industria cubana del azúcar ha vivido los últimos tres años un ligero despertar, tras tocar fondo en la zafra 2009-2010 con un millón cien mil toneladas, la peor cifra alcanzada en un siglo. Considerada hace veinte años la locomotora de la economía cubana, la industria sufrió una caída paulatina, desde los ocho millones producidos antes de la caída del campo socialista a los cuatro millones a finales de los noventa, y hasta los 1,2 de los últimos años.
Quizás durante los últimos tiempos, acompañado del deterioro de los centrales y los precios del azúcar en el mercado internacional, el país perdió la cultura de zafra existente. Hace diez años, en cualquier municipio existían grandes sembrados de cañas, la autopista nacional estaba rodeada de la gramínea y muchos pueblos vivían del trabajo en los centrales. El cierre de muchos de estos afectó a sus habitantes y las dinámicas de vida cambiaron drásticamente de un año para otro.
Sin embargo, la reanimación de la industria azucarera forma parte de la actualización del modelo económico, el cual se propone aumentar la producción de caña de manera sostenida. Según AZCUBA, la proyección de desarrollo prevé un crecimiento del 15 % cada año (aunque en estos tres el crecimiento ha sido del 12 %) hasta llegar a los dos millones cuatro cientos mil millones de toneladas producidas en 2015.
Según destacó Prensa Latina, el vicepresidente de AZCUBA, Noel Casañas, explicó que las reparaciones pertinentes se realizaron según lo previsto. Al contar a tiempo con los recursos se pudieron eliminar las deficiencias identificadas en la campaña anterior. Entre las mejoras mencionadas estuvieron la introducción de nuevos equipos, el aumento de la capacidad de transporte y se refirió a la importancia del adiestramiento del personal participante en esta zafra, con el objetivo de alcanzar una mayor eficiencia agroindustrial.
También hizo énfasis en la necesidad de que la materia prima llegue fresca al ingenio, así como de usar maduradores para incrementar la pureza del jugo, en aras de lograr el rendimiento industrial planificado. Agregó que el principal propósito es concentrarse bien y no perder tiempo para poder cumplir el plan.
Para esto, los centrales Jesús Rabí y Mario Muñoz, ambos de Matanzas, comenzarán a moler en noviembre. Luego se incorporarán otros 31 en el mes de diciembre, y el resto en enero, aunque el Brasil de Camagüey no comenzará hasta marzo. El Fajardo molerá durante 146 días, más que el resto de los centrales, e iniciará con 23 días de antelación con respecto a la zafra del pasado año, aseguró Dionis Pérez Pérez, especialista de AZCUBA.
Juan Carlos Pérez, director de la Atención a los Productos, destacó que para producir más caña se llevan a cabo la aplicación de programas dirigidos al incremento de la superficie de bajo riego, la explotación de áreas vacías o poco explotadas, la incorporación de más tierras y una mejor atención a los retoños con paquetes tecnológicos.
También es válido recordar las declaraciones de Liobel Pérez, especialista del Grupo Azucarero, al afirmar que el 91 % de los cortes de la gramínea serían mecanizados, empleando modernas cortadoras de tecnología brasileña y tractores de mediana potencia para preparar las tierras y la siembra.
Un buen ejemplo de los deseos de crecimiento en la industria azucarera está en Santiago de Cuba, la cual recién alcanzó las 7536 hectáreas, la mayor cantidad plantada en los últimos doce años. Superada solo por Sancti Spíritus, la provincia se convirtió en la segunda en cumplir con el compromiso anual, ascendente a las 7520 hectáreas y planea sembrar doscientas más antes de finalizar el año. Entre los centrales destacados están el Paquito Rosales, con 65 hectáreas por encima de las 1315 planificadas, el Dos Ríos, el cual acumula más de 2186 hectáreas y el Chile, con 691. Por su parte, los ingenios Mella y América Libre ratificaron el sobrecumplimiento de sus respectivos programas.
A pesar de las afectaciones sufridas a causa del Huracán Sandy el pasado año, la provincia reportó un 17 % de crecimiento en la caña de moler, lo cual se traduce en un 25 % del incremento del crudo.
Otros aspectos importantes a tener cuenta en la industria azucarera del país son los tratados realizados con entidades brasileñas y británicas. Por ejemplo, el central Cinco de Septiembre, en Cienfuegos, es administrado por la Comphania de Obras e Infraestrutura (COI), subsidiaria de la brasileña Odebrecht, tras un acuerdo con AZCUBA, lo que significará una inversión superior a los cien millones de dólares para elevar la producción de azúcar con la participación de equipos y tecnologías del gigante sudamericano. Bajo el mandato de la presidenta Dilma Rousseff, Brasil se ha declarado dispuesto a apoyar toda la agricultura de Cuba.
Otro caso es la creación de una empresa mixta entre AZCUBA y el grupo Havana Energy LTD del Reino Unid, que se encargará de producir energía renovable a partir de la biomasa de la caña en el central Ciro Redondo, en Ciego de Ávila.
Manuel Salcedo
21/11/13 14:33
Esta meta la lograrán, se los aseguro, ¿Qué es lo que no puede hacer el pueblo cubano en este planeta? Seguiré las noticias y veré que cumplieron la couta señalada para esta zafra. Saludos y hasta la victoria siempre.
Arnaldo Escalona desde FB
21/11/13 9:44
como el guarapo cubano no existe, ese sabor de azucar es solo de nuestro pais y mira que lo he tomado a donde he viajado.
German Gongora desde FB
21/11/13 9:43
Bello lugar !!
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