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martes, 5 de noviembre de 2024

Cuba en la ONU ante los ojos impotentes del gigante de siete leguas

El aplazamiento de la presentación y votación del documento de contra el bloqueo, no quiere decir que Cuba cesa de denunciar ante la ONU y el mundo esa política obsoleta que no tiene sustentos éticos ni jurídicos…

Laura Mercedes Giraldez Collera en Exclusivo 11/05/2021
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Fidel ONU
Durante más de cuatro horas el líder histórico de la Revolución Cubana expuso ante los delegados allí presentes las experiencias de la nación durante los últimos años

Este pequeño archipiélago del Caribe, que con esfuerzo propio ha sabido crecerse y mantener a raya a la mayor potencia imperialista conocida por la humanidad, en su batalla contra el injusto bloqueo que impone el gobierno estadounidense cuenta desde hace seis décadas, con el apoyo y respeto de numerosas naciones, ante los ojos impotentes del gigante de siete leguas.

Todavía hoy la humanidad recuerda la primera intervención de Fidel en la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU). Aquel histórico 26 de septiembre de 1960, sería registrado el discurso más extenso pronunciado en el principal órgano deliberatorio de la ONU.

Durante más de cuatro horas el líder histórico de la Revolución Cubana, expuso ante los delegados allí presentes las experiencias de la nación durante los últimos años y no solo denunció la injerencia del gobierno de los Estados Unidos en cuestiones gubernamentales de la Mayor de las Antillas, sino que además se pronunció a favor del derecho inalienable de cada país a decidir y preservar su soberanía. 

Aunque desde el propio año 1945 cuando se funda la ONU, Cuba tiene participación en las comisiones de trabajo y los debates de la AG, es a partir del triunfo revolucionario de 1959, que ha sido realmente activa en ese espacio.

La AGNU ha sido uno de los escenarios donde Cuba ha manifestado cómo afecta ese cerco económico, comercial y financiero a nuestro pueblo, recibiendo siempre un abrumador respaldo de la comunidad internacional.

Fue el año 1991 cuando por primera vez presentó ante la mayor organización internacional el Informe sobre la resolución 73/8 de la Asamblea General de las Naciones Unidas: Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba.

Aunque en esa cita la delegación cubana retiró el Proyecto de Resolución, debido a las presiones que ejercía Washington sobre numerosos países allí representados, al año siguiente no pudieron impedir que fuese presentado y votado el documento de denuncia. A partir de ese momento, de manera ininterrumpida, durante 28 oportunidades Cuba ha presentado la resolución y el rechazo al bloqueo ha sido avasallador, pues las naciones reconocen anualmente su carácter ilegal y contrario al multilateralismo, así como el impacto humanitario en la población cubana.

En el año 2016, tuvo lugar una votación sin precedentes pues, no hubo votos en contra, sino que Israel y Estados Unidos –que despedía a Barack Obama de su mandato presidencial- se abstuvieron, de modo que Cuba obtuvo 191 votos a favor de ponerle fin al bloqueo.

Sin embargo, a pesar del significado de esa victoria, no solo para nuestro país, sino para el mundo de modo general, en el 2017, tras asumir Donald Trump la presidencia estadounidense, ambas naciones volvieron a su posición frente al levantamiento de esa política hostil contra Cuba. Resultaron entonces, 191 a favor del cese, Estados Unidos e Israel en contra y no hubo abstenciones.

En el 2018, el debate en la Asamblea General sobre el Proyecto de Resolución cubana tomó dos días, a diferencia de lo acontecido en las 26 sesiones anteriores. La delegación estadounidense presentó ocho enmiendas que, en palabras de la cancillería cubana, pretendían alterar el proceso, buscando alargar el tiempo y cansar a la asamblea, para fabricar un pretexto que facilitase continuar aplicando el bloqueo. Esta no era la primera vez que el Departamento de Estado acudía a ese recurso para poner contra la pared a nuestra nación y sabotear el histórico apoyo de la comunidad internacional a Cuba.

La última vez que fue presentado en la ONU el documento Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba, ocurrió en el año 2019, obteniéndose 187 votos a favor, 3 en contra (Estados Unidos, Israel y Brasil) y 2 abstenciones (Colombia y Ucrania).

La expansión mundial de la COVID-19, ha sido la causa de que la votación del año 2020 fuese aplazada para este 2021. No obstante, en ese periodo, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, recibió informaciones de 159 Estados y 34 organizaciones internacionales, en apoyo a la resolución cubana.

Al respecto de la postergación, la viceministra de Relaciones Exteriores Anayansi Rodríguez Camejo, declaró que se ha decidido transferir la consideración del proyecto de resolución desde la fecha tradicional (entre fines de octubre y principios de noviembre) hasta que se reanude el periodo de sesiones 75, tomando en cuenta la compleja situación epidemiológica que afecta al mundo, en especial a la ciudad de Nueva York, sede de la ONU, y de esta manera «garantizar el buen desarrollo del debate y de la votación, cuyos positivos resultados son seguidos con mucha atención por el pueblo cubano y la comunidad internacional».

Este aplazamiento no quiere decir que Cuba cesa de denunciar ante la AGNU y el mundo esa política obsoleta que no tiene sustentos éticos ni jurídicos. Mientras persista el cerco, cada cubano, en cada escenario posible, acusará al gobierno de los Estados Unidos de violar el derecho internacional e intentar someter a nuestro pueblo utilizando el bloqueo. 


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Laura Mercedes Giraldez Collera

Periodista


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