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jueves, 3 de octubre de 2024

Feliz como un niño a los 108 años (+Fotos)

Un japonés jamás imaginó cumplir 108 años en el mismo territorio cubano en que estuvo preso mucho tiempo atrás…

Diego de Jesús Rodríguez Molina en Exclusivo 16/01/2016
1 comentarios

No se imaginó Miichiro Shimazu el 15 de enero de 1946, cuando hace 70 años saliera en libertad junto a unos 350 japoneses del campo de concentración en el otrora Presidio Modelo, que en tierra pinera cumpliera 108 años.

Y mucho menos habría soñado con en el hogar de ancianos Francisca Navia Cuadrado, en Nueva Gerona, en compañía de la Sociedad Colonia Japonesa de la Isla de la Juventud.

Había sufrido prisión en la Isla como presunto espía solo por haber nacido en Japón, país entonces en guerra con EEUU; pero ahora pudo compartir el día 24 de diciembre la celebración de su onomástico, a sus anchas, con amigos y trabajadores de la institución, además de hablar su lengua materna con el joven director de televisión Kenta Nakano, de la ciudad nipona de Kyoto, quien vino a visitarlo y a filmarle imágenes para un documental.

“Estoy asombrado de lo feliz que dijo sentirse –me expresa Kenta en español comprensible con mucha pausa– y de cómo sin familia y tan lejos de su tierra natal ha podido vivir largos años de forma tan saludable.

“Eso solo me lo explico –me confiesa– por los cuidados que tienen aquí con él y otras personas de la tercera edad, que festejan su onomástico como si fuera de todo el grupo…”.

Hasta el hogar llegaron integrantes de la referida Colonia con diversos platos como: el onigiri, arroz de la región japonesa de Niigata donde nació Miichiro, y el osushi, comida típica a base de pescado, preparados por Nancy Oropesa Barceló, señora de la hermandad cubano nipona y una de las promotoras del festejo, además de dulces y refresco que el homenajeado comió, bebió y disfrutó como si fuera un niño.

Solo interrumpió su fiesta unos instantes Lidia González Herrera, la enfermera de la casona de Salud Pública que lo acogió hace unas dos décadas, para llevarle las vitaminas que toma dos veces al día.

Vestido con una yukata oriunda de la lejana tierra, Miichiro observó y escuchó con alegre marcialidad las danzas interpretadas por muchachas descendientes de japoneses y las canciones dedicadas por su compañero de cuarto José Pérez Lemus, de 94 años, antes de ser rodeado para la habitual fotografía de cumpleaños.

Trabajadores y camaradas lo agasajaron de diversos modos, pero no faltaron instantáneas con el agricultor de la tierra del Sol naciente que a más de una centuria puede seguir cultivando sueños en la patria que lo acogió cuando no rebasaba los 20 años.

Hoy él tiene la dicha de estar entre los longevos de mayor edad de la nación con una de las más altas esperanza de vida (78,45 años), quimera para muchos en el orbe.


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Diego de Jesús Rodríguez Molina

Se han publicado 1 comentarios


Ali
 16/1/16 22:05

Me gustó el trabajo publicado y el singular homenaje al anciano japonés de la Isla de la Juventud, de poder cumplir feliz los 108 años en el mismo territorio donde sufriera prisión en tiempos de la segunda guerra mundial de forma injusta no solo por ser japonés sino también por adular al gobierno de Estados Unidos, como si todos los japoneses fueran espías. Que cosa más absurda..., que no debemos olvidar y nos hace recordar Miichiro. Felicidades, que sigas cumpliendo y llegues a los 120... Un abrazo, Ali

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