Nuestro apreciado ajo con recetas saludables

Ajo, del latín halium sativum, significa dar olor. Nativo del oeste de Asia, el ajo está constituido por un bulbo o cabeza de 10 a 15 dientes cada una. Pertenece a la familia botánica de las liliáceas, donde pertenecen otros frutos olorosos como la cebolla, los puerros o la cebolleta y forma parte las verduras frescas.

Para aprovechar al máximo las propiedades del ajo, este se debe consumir de manera natural machacado o masticado, no frito o cocinado, aunque existen varias opiniones donde se afirma que mantiene sus propiedades tras el proceso de cocción o fritura. No obstante, es preferible tomar el ajo crudo e incluso tomarlo en ayunas desde el punto de vista medicinal.

PROPIEDADES BENEFICIOSAS PARA LA SALUD

Se atribuyen principalmente a algunos de sus componentes azufrados. Posee una sustancia derivada del azufre, denominada aliina, volátil. De este modo, cuando se pica, trocea o machaca el ajo, la aliina se convierte en alicina y se libera provocando su característico olor. La alicina en estado natural, es decir, en el ajo crudo, es como mayor efecto posee.

Esta sustancia posee también la capacidad de aumentar la expectoración, así que se puede usar, conjuntamente con los líquidos, como un buen expectorante en procesos catarrales, gripales o alérgicos como el asma bronquial, además de incrementar las defensas del organismo. La alicina es un aliado de la buena circulación, pues reduce la capacidad de coagular de la sangre. Es útil en personas con cierta tendencia a la formación de trombos sanguíneos. Por esta razón se debe suspender su uso previamente a cualquier intervención quirúrgica o extracción dental.

PROPIEDADES NUTRICIONALES DEL AJO

Los componentes activos del ajo son los aminoácidos ácido glutámico, arginina, ácido aspártico, leucina, lisina y valina. Sus principales minerales son manganeso, potasio, calcio y fósforo y en cantidades menores magnesio, selenio, sodio, hierro, zinc y cobre. Contiene vitamina B6, también C, y en cantidades menores ácido fólico, pantoténico y niacina, vitamina A y vitamina E.

Algunas otras propiedades del ajo son: ser bajo en calorías, rico en nutrientes y muy aromático. Por estos motivos, el ajo es una buena opción para dar sabor a las comidas. Así se puede reducir el uso de otros ingredientes no tan saludables como la sal, reduciendo de esta forma la ingesta de sodio.

ACCIÓN SALUDABLE DEL AJO

Para muchos el ajo es considerado un alimento funcional por excelencia, pues posee un efecto beneficioso sobre una o varias funciones específicas en el organismo, más allá de los efectos nutricionales habituales.

El ajo se ha relacionado de forma beneficiosa con enfermedades cardiovasculares, debido a su capacidad para dilatar o ensanchar los vasos capilares, los más estrechos, y ayudar así a la sangre a fluir en enfermedades como la hipertensión arterial. Su contenido en compuestos sulfurados contribuye a mejorar la circulación de la sangre pues reduce el bloqueo de las arterias y la agregación plaquetaria debido a un compuesto que posee, la adenosina.

El ajo tiene cierto efecto en la reducción del denominado colesterol “malo” y de los triglicéridos sanguíneos, y de elevación del “bueno”. Así puede resultar útil en procesos de hipercolesterolemia o hipertrigliceridemia. También ejerce cierto efecto hipoglucemiante, ayudando a prevenir y controlar la diabetes mellitus tipo II.

Según estudios recientes, el ajo es beneficioso en la prevención del cáncer, entre ellos el gástrico o el de colon La protección es por sus compuestos sulfurados, relacionados probablemente con la capacidad de inhibir la formación y activación de inductores cancerígenos como las nitrosaminas, ayudando en la reparación del material genético celular y mejorando las defensas del individuo.

El ajo es un remedio natural efectivo para combatir los hongos como la Candida albicans y tiene efecto diurético, pues previene la retención de líquidos por su aporte en potasio. Otro gran beneficio es su acción analgésica y puede ser eficaz para prevenir o mejorar hemorroides y venas varicosas y varices.

Externamente, puede utilizarse para curar picaduras o mordeduras de animales, especialmente insectos, como desinfectante para la mayoría de afecciones de la piel como hongos, heridas, llagas y quemaduras y, según algunos, pudiera servir para combatir la sarna, las verrugas y hasta los callos. Por todo lo expresado hasta aquí, se puede considerar el ajo una planta medicinal.

AJO Y MAL ALIENTO

La relación entre ajo y mal aliento es algo posible de evitar o reducir lavándose muy bien los dientes y la lengua, tomando jugo de limón puro, enjuagándose la boca con una cucharadita de bicarbonato de sodio disuelta en agua, masticando una ramita de perejil o comiendo algo dulce.

EN LA COCINA

Un preparado industrial de ajo sin su olor característico, es para desconfiar del contenido de alicina del mismo y, por tanto, de su potencial real. El ajo es un aliado fundamental de la seguridad alimentaria, pues es un potente desinfectante frente a algunos de los microorganismos que más intoxicaciones alimentarias causan, como es el Campylobacter. Es más seguro para nuestra salud conservar una carne picada con ajo crudo y machacado añadido. Comprar el bulbo completo, pues su presentación en polvo o en pasta no ofrece los nutrientes valiosos de este gran condimento.

El ajo se utiliza como aderezo de ensaladas, sopas, quesos, carnes, pastas y verduras. Las rodajas de pan o las cacerolas pueden frotarse con un diente de ajo pelado para darle sabor. En platos como pescados, pollo, carnes o papas que requieren más tiempo de cocción se recomienda colocar el ajo casi al finalizar, pues si se cocina en demasía toma sabor amargo. Para su mejor conservación, lo recomendado es colgar las ristras en lugar fresco y oscuro para evitar que el bulbo se seque y que de esta forma dure varios meses sin degradarse. Una vez que se separan los dientes del bulbo, estos duran aproximadamente 10 días. Cuando uno los compra, los bulbos deben ser firmes y con la piel seca.

RECETAS SALUDABLES CON AJO

COL CON AJOS

Dos raciones.

Una ensalada ideal.

Ingredientes:

- 1 col mediana.

- 4 dientes ajos grandes.

- Aceite de oliva virgen extra.

Instrucciones:

- Se cocina la col en agua hirviendo con una pizca de sal.

- No se debe hervir en exceso la col, pues debe quedar al dente.

- Se escurre y se trocea.

- Seguidamente se coloca en una fuente de horno.

- Mientras, en una sartén con el aceite de oliva se fríen los ajos cortados y machacados y se dejan hasta que estén dorados.

- Se riega la col con el aceite y los ajos y se lleva la bandeja al horno precalentado.

- Se deja gratinar la col con ajo durante 3 minutos y se puede servir en la misma cazuela.

Nota:

Se puede espolvorear un poco de pan integral rallado mezclado con perejil picado fino, así el gratinado de la col con ajo quedará más presentable.

Una receta completamente sana y deliciosa

LA CLÁSICA SOPA DE AJO

Dos raciones.

Un entrante especialmente nutritivo.

Ingredientes:

- 2 dientes de ajo.

- 2 huevos.

- Perejil picado al gusto.

- 1 cucharada de harina de trigo integral.

- Pan integral en rebanadas.

- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra.

- Pizca de sal, opcional.

Preparación:

- Cocer los dientes de ajo en un poco de agua y luego machacarlos. Añadir más agua y llevar a ebullición.

- Así mismo batir aparte los huevos con el aceite y la harina de trigo integral y verterlos en el caldo hirviendo

- Tostar las rebanadas de pan integral y colocarlas en los platos, así mismo, espolvorearlas con un poco de perejil picado, verter la sopa hirviendo y servir.

ALGUNOS PLATOS CON AJO

- A modo de guarnición podemos elaborar un puré de papas, de calabaza o de boniato con ajo, ideal para acompañar carnes sanas con mucho sabor y buenos nutrientes.

- Asado junto a carnes, para dar sabor a las mismas. Se puede elaborar un pollo asado “a los 40 dientes de ajo”. O un pescado al horno con pan integral rallado y ajo o un pollo a la cazuela con ajos confitados con edulcorantes (sucralosa o estevia).

- Otra variante es elaborar ajos confitados de esta manera, para variar el sabor de la mayonesa o incluirlo en ensaladas con este ingrediente ya de ligero dulce sabor.

MAZORCAS DE MAÍZ TIERNO CON AJO TOSTADO

Se debe utilizar mazorcas tiernas para que queden crujientes.

Cuatro raciones.

Ingredientes:

- 15 onzas de maíz tierno precocinado hecho en casa o industrial.

- 1 cucharadita de aceite de oliva, preferentemente virgen extra.

- Jugo de medio limón amarillo.

- 5 ó 6 dientes de ajo rebanados finamente.

- Pimienta al gusto.

- Pizca de sal, opcional.

Instrucciones:

- Caliente el aceite de oliva en un sartén con fuego medio.

- Agregar los granos de maíz y el ajo.

- Cocinar de 6 a 8 minutos hasta que los granos queden tiernos y el ajo este tostado, pero no quemado, moviendo con frecuencia.

- Exprimir el jugo de limón encima de las mazorcas y agregar pimienta al gusto.

PURÉ DE PAPA CON AJO

Ingredientes:

- 1 ½ litros de agua.

- 4 papas medianas peladas.

- 3 cucharadas de aceite de oliva extra virgen.

- 4 dientes de ajo machacados y picados finamente.

- Pizca de sal, opcional.

- Pimienta blanca y nuez moscada al gusto.

Preparación:

- Colocar el agua y la sal en una cacerola y dejar hervir.

- Agregar las papas y cocinar por 30 minutos o hasta cocinarlas totalmente.

 - Sacar las papas del agua y aún calientes, aplastarlas con un tenedor hasta conseguir un puré fino.

- Calentar una cacerola, añadir el aceite de oliva y freír en ella los ajos hasta dorarse.

- Añadir el puré y cocinar por 5 minutos más.

- Sazonar con el resto de los ingredientes.

- Servir caliente y acompañar con alguna saludable carne de su preferencia.

CREMA DE AJO

Una taza.

Un gran acompañante saludable.

Ingredientes:

- 3 dientes de ajo medianos.

- 1 taza de crema agria descremada.

- 2 cucharadas de mayonesa de grasa reducida.

- 1 cucharada de perejil fresco picado en trocitos.

 Preparación:

- Colocar el ajo en una batidora y batir brevemente con un poquito de mayonesa.

- Añadir la crema agria, la mayonesa restante y el perejil.

- Batir durante un minuto o hasta que todos los ingredientes se incorporen perfectamente.

- Servir esta crema con papas al horno o cocidas, verduras al vapor o pescado.

Una verdadera delicia.

PASTA DE AJO

Ingredientes:

- 1 cabeza de ajo, grande.

- 3 cucharaditas de aceite vegetal, preferentemente oliva virgen extra.

Procedimiento:

- Abrir la cabeza de ajo, separar y descascarar los dientes.

- Triturar en un mortero.

- Añadir el aceite lentamente al ajo aplastado.

- Mezclar hasta obtener una pasta espesa.

- Se puede añadir miel al gusto y gotas de jugo de limón.

- Servir la pasta acompañada de legumbres cocidas, como zanahoria, nabo, col o papas.

 - Si desea que la pasta adquiera un sabor más picante, preparar la receta el día anterior al consumo.

HUMUS DE TOMATES, GARBANZOS Y AJO

Tres o cuatro personas.

Un almuerzo totalmente saludable para cualquier edad.

Ingredientes:

- 15 onzas de garbanzos cocidos.

- 2 tomates maduros medianos.

- 2 cabezas de ajo.

- ½ cebolla mediana.

- Pizca de sal, opcional.

- ½ taza de agua.

Preparación

- Colocar todos los ingredientes en una batidora.

- Batir por 5 minutos hasta obtener un puré.

- Servir en un plato hondo.

- Decorar con granos de maíz tierno, masas de pollo y pedacitos de ají pimiento asado de color rojo. Va a querer repetir.