La edición XXI de la feria Arte en la Rampa que culminó este 4 de septiembre convoca cada año a miles de visitantes. No es solamente el espacio donde artistas y emprendedores talentosos de Cuba exponen y comercializan su arte, sino que es ese rincón donde cada uno se da a conocer al mundo.
El evento, organizado por el Fondo Cubano de Bienes Culturales, la Asociación Hermanos Saíz, MINCULT, ARTEX, EGREM… dedicaron esta fiesta del arte al aniversario 50 del Movimiento de la Nueva Trova, a los 60 años del sistema de escuelas de la enseñanza artística, al natalicio 120 del poeta nacional Nicolás Guillén (1922-1989), y a los cien años de los natalicios de la poetisa matancera Carilda Oliver Labra (1922-2018), del poeta y decimista cubano Jesús Orta Ruiz “El indio Naborí” (1922-2005) y Ramiro Guerra Suárez (1922- 2019).
Los agasajados de Arte en la Rampa pueden destinar horas para disfrutar ofertas asociadas a la cerámica, orfebrería, calzado, textiles, libro y literatura, productos para el hogar…, que aunque no exentas de elevados precios, te hacen sentir a gusto tan solo por su calidad y belleza.
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Algunos de sus expositores tienen historias que contar como: Baeza´s Piel e Imagen, proyecto familiar conformado por los hermanos Rodolfo Baeza y Yadira Baeza quienes heredaron de su padre la tradición de la artesanía desde 1989, llegando hasta nuestros días con productos atractivos que cautivan al consumidor curioso.
Conversando con Yadira Baeza, expresó: “Mi hermano y yo jugábamos a ser artesanos, a confeccionar lámparas, carteras…luego crecimos, estudiamos y nos graduamos de Pedagogía como profesores de Matemáticas y Español, respectivamente. Pero, siempre se impone el negocio familiar, al fallecer mi padre Rodolfo Baeza Fernández fundador de las primeras ferias organizadas en FIART continuamos nosotros, presentándonos en Arte para Mamá, Arte para Papá, FIART, Arte Rampa… Mi madre Isabel Vega, mi esposo Yordan Portieles y otros trabajadores como: José A. Quintana y “El Lachi” también forman parte del proyecto”.
Conocer el lenguaje del arte en la naturaleza del cuero se hace necesario para exhibir la mejor prenda con elegancia, sutileza y desenfado a la vez. El proyecto resalta por sus diseños modernos, casuales, sugerentes y exclusivos. Entre sus productos están: carteras, mochilas, bolsos, carpetas, portafolios, zambranes… todos hechos con pieles cubanas. “La importación de pieles es cara y eso conllevaría a un elevado precio de los productos. Solamente importamos pegamentos y tintas”.
Antes de la pandemia COVID-19 Baeza´s Piel e Imagen efectuaba exportaciones hacia una hermosa tienda en Martinica. Posterior a esta, no han vuelto a efectuarlas. Yadira lo recuerda con anhelo y añoranza.
Los hermanos defienden el buen gusto que reverencia la firmeza del cuero como producto duradero, aunque reconocen que a veces, como creadores independientes, les faltan muchas cosas, ya que en lo que algunas se crean y viabilizan; otras se detienen. Consideran que estas dependerían del nivel de adaptación de cada cual. “Creo que el artista cubano, sobre todo los artesanos hemos aprendido a crecernos en los tiempos difíciles. Nosotros como proyecto, nos adecuamos y producimos con lo que tengamos, hasta donde podamos llegar”.
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“Al surgir los nuevos cambios en los modelos de gestión económica, varias empresas modificaron sus presupuestos, y las que antes nos contrataban, ya no cuentan con estos. Actualmente, nuestros principales consumidores son el pueblo. Ellos han aprendido a aceptar las pieles y los nuevos cambios en los precios, tanto, como lo hicimos nosotros. Antes, los mayores consumidores de Baeza´s Piel e Imagen eran los turistas. En pocas ocasiones vendíamos a cubanos, ya que estos en su mayoría buscaban otros productos y tendencias, algo que cambió con la Covid-19. Cuando diversos productos se les deterioraban en casa, los consumidores vieron la necesidad de adquirir otros. Muchos reconocieron de una vez, el alto valor de nuestra artesanía, hermosa y duradera. A diferencia de las ferias de Arte para mamá y Arte para papá, el público que ha llegado este año a Arte en la Rampa ha sido más receptivo, comunicativo, adaptado y abierto a los cambios. Las pieles tienen un lenguaje. Cuando veas a alguien que lleva prendas de piel, sabrás que ahí va una persona que sabe lo que quiere y es dueño de sus actos, de sus pasos y que sabe muy bien que su criterio vale”.
Y es así como cerramos este verano en Arte en la Rampa edición XXI, entre nuevos proyectos y emprendedores; junto a diversas manifestaciones en las que el buen arte siempre estará presente. Vendrán otras ferias donde el público, sin dudas, se sentirá a gusto con su espíritu aventurero y alegría que lo caracteriza. Iremos hacia Arte en la Rampa edición XXII con nuevos retos y metas para seguir potenciando nuestra cultura cubana y nuestra economía.
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