Jazz Vilá Projects vuelve a sus inicios, diez años después

Hace una década debutaba en la escena cubana la compañía Jazz Vilá Projects, con Rascacielos una propuesta polémica, controversial, marcada por formas de producción poco habituales para la praxis escénica cubana –donde confluían mercado y arte– que, sin dudas, tributaron al éxito incuestionable de taquilla y público, desde de su estreno en la sala Adolfo Llauradó de la Casona de Línea.

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“Justamente cuando se cumplen diez años hay que celebrar cuál es la raíz, la semilla. Y no había mejor obra que Rascacielos, sobre todo porque cuando la estrené nunca pensé que fuera a tener tal magnitud. Iban a ser doce funciones y terminaron siendo 84 (…) y es lo que hizo que fuera tan importante”, explicó Jazz en un encuentro con la prensa.

En su opinión, Jazz Vilá Projects significó un cambio para el teatro cubano. Su teatro está “pensado para los espectadores y no con ese afán de hacer algo para mí o hacer algo más artístico (…). Siento que hay que contar otras historias más cercanas donde ese público joven se vea reflejado. El teatro es un lugar para que la gente vaya. Para mí el teatro es símbolo y sinónimo de entretenimiento”.

El director de la agrupación que pertenece al Centro de Teatro de La Habana dijo que se propuso revisitar Rascacielos y hacerle un homenaje a la historia de la compañía con esta puesta en escena:

“Diez años después tiene una vigencia tremenda en su tema principal que es la incomunicación, aunque creo que se acentúa. Pero el entorno si ha cambiado un poquito. No había rascacielos en La Habana cuando yo construí el mío y entonces, en ese instante, era un poco como la añoranza, el sueño. Ahora, a menos de cien metros de la sala El Sótano, donde vamos a reponer la obra, se alza un rascacielos gigante: el más grande de La Habana, increíblemente”.

Jazz le dedica esta reposición a la memoria de Broselianda Hernández quien la estrenó. “Para mí fue un regalo que ella me hizo en mi vida porque era mi primera obra. No había dirigido nada y es muy importante que personas de ese peso confíen en jóvenes que empiezan, pero jóvenes con una visión clara de qué quieren hacer en el teatro. Además esta fue la última obra que ella hizo en vida, en Cuba”.

En otro momento de su intervención agregó que también quiere celebrar la vida y por eso la otra dedicatoria es para la actriz Dania Splinter, quien asumió el personaje de Ana y es la persona que más ha hecho la obra en Cuba y en su versión para el Paseo de las Artes, en Miami, Estados Unidos.

TODO EL ELENCO DEBUTA EN RASCACIELOS

El elenco está conformado por los noveles actores Leonardo Alomá, Havana, María Carla Cardona, Beatriz Sánchez, Javier Quesada, Eddy Driggs (el Nagüe de la serie Calendario), Nesty Alemán y Elizabeth Castro Cedeño (estudiante de actuación a quien vemos actualmente en la telenovela Viceversa). Tommy Delgado asume el rol de Lorenzo, el protagonista y leit motiv en todas las obras de Jazz.

Los intérpretes provienen de distintas disciplinas: entre ellos hay una bailarina, una abogada, un modelo lo cual ratifica que la agrupación es una suerte de escuela.  Todos tienen en común el interés en debutar profesionalmente en las tablas, con Jazz Vilá Projects: “Es un reto importante y uno de los riesgos que a mí me da por correr: hacer una puesta con todo un elenco nuevo. Creo mucho en la gente joven y en el hecho de seguir haciendo”, afirma el director.

A veces capta en los nuevos actores lo que ellos no son capaces de ver, asegura: “Ese es el trabajo que más me cuesta: hacer que la gente se dé cuenta de su valor histriónico y de su valor humano. Eso lleva desatar muchísimas cortinas de humo”. Hay personas que se acercan a la compañía en su sede de B entre 11 y 13 (en El Vedado) o hablan con Jazz en los talleres que le invitan a impartir.

VERSIÓN RENOVADA

Esta reposición trae un cambio importante en la banda sonora. Toda la música del espectáculo está concebida a partir de páginas musicales escritas por Pablo Milanés, que conectan con la memoria colectiva de muchas generaciones de cubanos.

Además se estrenará el tema Instantes, de la autoría de Ernesto Casanova, que los actores cantan durante la puesta. La canción cuenta con un video clip, dirigido por Jazz, con fotografía de Dayron Villalón.

Por otra parte, Jazz adelantó que a nivel de puesta en escena no usará paneles. La nueva versión será mucho más minimalista. Se centrará más en las situaciones de los personajes, la atmósfera y la historia.

Las funciones de Rascacielos serán en una temporada única entre el 5 y el 28 de abril, todos los fines de semana, en doble función: a las 5 y a las 7 de la tarde.

En El Sótano por primera vez habrá un punto para la comercialización de merchandising (productos promocionales relacionados con la historia de la compañía) como: termos, vasos, pulóveres, entre otros.

UNA MIRADA A OTRAS PUESTAS DE LA COMPAÑÍA 

Ya son seis años ininterrumpidos de Farándula en las tablas. “Estoy trabajando para tratar de hacer una función permanente en algún espacio para ese público, que quiere entretenerse y ve en el teatro una opción importante. Estamos buscando un espacio alternativo para que esta obra, que es de tal agrado popular, llegue todo el año”.

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Jazz resaltó que su compañía ha sido capaz de conectar con distintos públicos “y desde ese punto de vista he querido que la conexión esté también a través de las generaciones con las que trabajo. El éxito de la compañía es indiscutible”.

En Farándula Deluxe, que se presentó en el cine Charles Chaplin, tuvo un elenco de lujo: Blanca Rosa Blanco, como Sara (quien llevaba 30 años sin hacer teatro); Beatriz Viñas, en el rol de Helena y Enrique Bueno como Lorenzo.

Otro sector de su público se conecta con los espectáculos humorísticos de Michel Pentón. “Por eso el hecho de que la compañía tenga esa masividad de jóvenes que acuden al teatro. Pero también hay un Círculo de abuelos que son fieles seguidores y alquilan ómnibus para ir a ver mis obras”.

LÍNEAS CREATIVAS

Jazz se refirió a las tres líneas creativas de la compañía, que ahora engloba en el concepto más amplio del entretenimiento: el teatro popular (con las grandes obras Rascacielos, Eclipse, Farándula y Candela); el teatro mínimo, con funciones como Barataria y el teatro infantil.

El director ha sumado una nueva línea que es el área audiovisual. Este año se está realizando la adaptación de Farándula, en formato de serie, para la Televisión Cubana, con Magda González Grau, en la dirección; guion de Amílcar Salatti, Alexis Álvarez, en la dirección de arte y Luis Natmías, en la edición.

Después de la temporada estival Jazz Vila Projects llegará con un nuevo estreno titulado Los puentes, que tendrá una versión cinematográfica dirigida por el cineasta argentino Martín Deus, egresado de la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños.

“Es la obra con la que voy a volver a la escena y eso es parte del nuevo camino que va a dejar pautado la compañía en la próxima década, porque va a ser una nueva manera de hacer el teatro, de una forma bastante peculiar”.

Adelantó que Los puentes es una pieza muy minimalista que habla de la intimidad. Con ella le rinde tributo al desaparecido Premio Nacional de Teatro, Nicolás Dorr.

Como colofón expresó gran alegría de contar con tanta respuesta del público. Ya se han presentado 230 funciones de Farándula y Candela, que en menos de un año estuvo en Cuba, República Dominicana, México, y es la primera obra cubana con una temporada de un mes en Broadway, Nueva York.

“Es un premio al trabajo de diez años, al trabajo de los actores, de los técnicos, de los que lo hacen posible. Es el ejemplo para que los jóvenes sigan creyendo que vale la pena hacer teatro. Es importante que el teatro también sea sinónimo de forma de vida. Pienso que hay que hacerlo sostenible, replantarse muchas cosas. Es importante hacer teatro en Cuba para los espectadores y para los actores. Me siento afortunado de hacer lo que amo.

“Concebimos la compañía como un mecanismo que funciona en todos los aspectos y en todos los sentidos. Hace dos años implementamos un sistema de reciclaje de los envases que utilizamos y esa es una fuente para generar ingresos. Una compañía es un centro donde se labora y se crea con el alma y con los sentimientos de las personas: con los que están detrás, arriba y abajo, con todos y eso es sumamente importante entenderlo”, concluye Jazz.