miércoles, 25 de septiembre de 2024

Palestina: firme decisión

Las autoridades palestinas parecen haber optado por conquistar de una vez y por todas el reconocimiento internacional a un estado árabe independiente...

Néstor Pedro Nuñez Dorta en Exclusivo 08/01/2015
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A pesar de la mancomunada oposición del sionismo y de los sectores norteamericanos de poder, favorecidos estos últimos por el controvertido derecho al veto dentro del exclusivita Consejo de Seguridad de la ONU,  los representantes de Palestina se muestran decididos a abrirse paso en el logro del reconocimiento mundial a la existencia de un Estado árabe soberano y desligado de la prolongada y violenta  tutela israelí.

En efecto, a tono con el programa que pretende la creación de una entidad palestina independiente para 2017, la Autoridad Nacional Palestina, ANP, a través de Jordania, interpuso nuevamente, a fines del pasado diciembre, y ante el ya  mencionado Consejo de Seguridad, un documento que solicita el establecimiento de un Estado soberano cuyos límites fronterizos sean los existentes antes de 1967 y con capital en Jerusalén del Este.

Como en ocasiones anteriores, y en apoyo al revuelo de Tel Aviv, optó Washington por aplicar su veto a la resolución, mostrando con ello la razón que asiste a quienes afirman que en el tema mesoriental  la política oficial norteamericana se proyecta desde los círculos sionistas israelíes.

 Sin embargo, en lo que evidencia una fuerte ofensiva diplomática palestina en más de una dirección táctica, los representantes de la ANP lograron su nominación, hace apenas unas horas, como integrantes de la Corte Penal Internacional, CPI, regida por Naciones Unidas, lo que les permitiría solicitar el enjuiciamiento de los militares sionistas por sus reiterados crímenes de guerra contra la vapuleada población palestina.

Esa incorporación, ratificada por las más altas instancias de la ONU para  hacerse efectiva el próximo mes de abril, tiene como sustentos inmediatos, junto a la voluntad palestina de hacer valer sus derechos a escala global, el hecho de que la Asamblea General del máximo organismo mundial, junto a parlamentos de varias naciones de Europa occidental, hayan aprobado reiteradas solicitudes no vinculantes que reclaman la existencia de una nación árabe palestina frente al ente sionista.

Y como era de esperar, las reacciones en Tel Aviv y Washington contra  la “osadía” árabe volvieron a ser similares hasta en su contenido.

El primer ministro sionista, Benjamín Netanyahu, anunció con aires alterados la suspensión de la entrega de los 105 millones de euros en impuestos correspondientes a diciembre que Israel debe poner en manos de la ANP, y que le permiten a esa entidad pagar salarios a sus funcionarios y agentes del orden, entre otros gastos.

Medida que, dicho sea de paso, pareció extrema e impensada a algunos funcionarios sionistas, como el propio presidente israelí Reuven Rivlin,  que temen que la paralización del gobierno palestino agregue mayor inestabilidad y fragilidad a una problemática bilateral tradicionalmente explosiva.

Coincidentemente, el Departamento norteamericano de Estado, calificó a los palestinos de “no elegibles” para integrar la  CPI, y ratificó  que EEUU, que no ha querido formar parte de esa entidad de justicia, no considera a Palestina  como una nación soberana “ni lo hará jamás.”

 Y aunque el vocero de marras se cuidó de asegurar que la Casa Blanca no contempla sanciones financieras contra la ANP, el Congreso (ahora en manos conservadoras) ya había aprobado días atrás un documento que retiraría del presupuesto para 2015 una partida anual de 440 millones de dólares destinada a los palestinos si insistían en adherirse a la Corte Penal Internacional y en juzgar a Israel ante ese organismo por la ejecución de reiterados  crímenes de guerra.

Decisión legislativa que contrasta con el hecho de que ese mismo congreso lleva decenios otorgando al ente sionista el mayor monto de ayuda militar que Washington destina a país alguno, prueba contundente del  nocivo maridaje entre los aspirantes a hegemonistas globales y sus agentes mesorientales nada dóciles ni abúlicos en materia de agresividad y expansionismo congénitos.


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Néstor Pedro Nuñez Dorta

Periodista

Se han publicado 1 comentarios


GERDOL
 10/1/15 12:00

ESPERO QUE PALESTINA SEA UNA NACION SOBERANA Y LOS JUDIOS ISRAELITAS TERMINEN SUS DIAS EN EL INFIERNO POR TODAS LAS CALAMIDADES QUE HACEN A A LA HUMANIDAD

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