Se acabó la mitad del calendario de la temporada cubana de béisbol y lo único claro es que no hay nada en claro con miras a los play off. Un simple dato: si el corte definitivo fuera hoy, Pinar del Río se quedaría fuera, y eso que solo lo separan cuatro juegos del primer lugar y uno del octavo.
Así de ajustada anda la tabla de posiciones, en la que Holguín, ocupante del puesto 14, sigue soñando con una racha, posible y en sus manos, que lo catapulte, pues también son cuatro rayas las que median entre ese equipo y los matanceros, alojados en el último lugar con pasaje a la postemporada.
Entre martes y jueves la noticia se produjo a la vera del río Yayabo, donde los Gallos dieron pollona a Mayabeque. Fue la única subserie que concluyó por 3-0 y con ese resultado ambos elencos se abrazaron en el puesto de mando del pelotón.
Con tantas bajas de un año a otro, muchos no pensaron en la capacidad de los espirituanos para conseguir, al menos, un puesto entre los ocho mejores. Sin embargo, han hecho los ajustes necesarios, y de los últimos diez juegos han ganado ocho, para ascender hasta lo más alto del ordenamiento.
Quiso el destino que los mentores que dirigirán el próximo Juego de las Estrellas sean los que ocupan la cima antes de la parada de mediados de temporada para reunir a la mayoría de los de mejor rendimiento en Matanzas.
Los Huracanes venían de doblegar par de veces a los Tigres avileños y ahora fueron ellos los barridos. Su liderazgo no solo está compartido, sino que detrás hay dos más soplándoles en la nuca, y otro grupo de cuatro asediando fuertemente su plaza.
Villa Clara, Granma y Santiago de Cuba estuvieron próximos a blandir la escoba, pero sus adversarios lograron escaparse del golpe este jueves, en todos los casos decidiendo los choques en el último tercio.
Los Leopardos de Pedro Jova salieron de una racha negativa de cinco derrotas con par de triunfos ante los Toros camagüeyanos, los que, aún por debajo de la tabla, habían mostrado signos de recuperación en sus salidas más recientes, apoyados en su poderosa ofensiva de largo alcance, líder en extrabases (128).
Los futuros peloteros han disfrutado el regreso del público a las gradas. (Abel Rojas Barallobre/Cubahora)
Sin embargo, no fue esa arma la que los condujo a ganar este jueves, cuando se vieron contenidos, de manera casi inexplicable, por un jovenzuelo cuyo nombre no conocían ni los parciales de Villa Clara.
Parecía que a Dairon Casanova lo habían enviado al matadero, pero nuestra pelota es muy impredecible, y el muchacho dejó en un solo jit a los Toros y les cerró el home plate durante los seis tramos en que trabajó.
Su adversario, el invicto Pepe, sí caminó toda la ruta y firmó su quinto éxito. Su mentor sabía que con el duelo tan cerrado su bullpen podría malograr un resultado que necesitan para buscar emparejar el saldo de ganados y perdidos.
José Ramón Rodríguez, un brazo recuperado con la ayuda del sabio José Manuel Cortina, pintó de blanco a los Leopardos, que, sin una nómina impresionante, aparecen en zona de clasificación.
Industriales estuvo a un out de caer por tercera vez en Bayamo, pero consiguieron voltear la pizarra con imparable de Donnie Boza, doblete de Alberto Calderón y un error de la defensa incluido.
Los Alazanes, junto a Holguín, sacaron siete éxitos de sus últimas diez salidas; balance solamente superado por Sancti Spíritus y Las Tunas (8-2). Mientras, el peor saldo en ese lapso lo registraron el sotanero Cienfuegos y el subcampeón, Matanzas (2-8).
Aún heridos por haber quedado al campo el miércoles, los pinareños salieron en el partido del adiós a no dejarse humillar. En su caso, más blindados en el montículo que al bate, apelaron esta vez a la fuerza de dos de sus hombres: William Saavedra y Yaser Julio González, quienes sacudieron cuatro palos de vuelta entera, repartidos a partes iguales.
Con ventaja en el marcador, era hora de Frank Luis Medina. Su punto por juego salvado fue el séptimo, y parece que esta será una temporada de varios ajustes en los roles, pues además de él, Vladimir García (CAV) y Carlos Juan Viera (LTU) han sido enviados al bullpen para asegurar los remates.
Como dice el profesor Cortina, esa última entrada es tan compleja como la primera o la quinta. Sobre todo, en los partidos de pizarra cerrada.
Si Las Tunas no barrió se debió a un triple del paracortos cienfueguero Luis Vicente Mateo el martes a la hora de cerrar la hoja de anotaciones.
A sus 45 años, Dánel Castro sacudió jonrones en los dos juegos más recientes. Es como si él se burlara de los años, aunque hay más de diez cuarentones dando de qué hablar en la justa por sus buenos números y protagonismo.
En una tanda portentosa, Dánel sigue siendo el tercer madero. No son locos quienes abogan por levantarle una estatua en vida. Es inspiración y constancia. Y en los momentos cruciales no quiera tenerlo bate en mano, si su equipo es el rival.
Desde los puestos de atrás, Holguín sabe que es hora de una reacción, igual a la que han tenido otros equipos. Siete triunfos con tres derrotas es una esperanza para el estratega Héctor Hernández, quien nunca ha dejado de decir, ni en las peores rachas, que su mente está en los play off.
Ahora doblegaron par de veces a La Isla y, en el último choque, el mentor isleño, Mandy Johnson, se jugó sus mejores cartas para ganar el pulso. Tras el abridor Jonathan Carbó entregó la bola a sus mejores cerradores: Kendry Hernández y Franklin Quintana, ambos con siete rescates, pero el primero no entró fino y soportó cuatro anotaciones con las que encajó su cuarto revés en la campaña.
Si alguien tuvo dudas de que esta probablemente sea la temporada más reñida de todas, la realidad va confirmando el vaticinio. A partir del martes se jugará la segunda mitad del calendario, y se espera que, como está sucediendo en la mayoría de los partidos, la definición sobrevenga en el último tercio.
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