Soluciones a nuestros principales problemas económicos espera el pueblo de su Parlamento

Cuando el 19 de abril con la constitución de la Asamblea Nacional del Poder Popular comience la X Legislatura, estoy seguro que todos sus diputados ya sea a nivel de comisiones de trabajo, ante el plenario y en otras circunstancias o espacios tendrán muy en cuenta los reclamos y recomendaciones emanados de los recorridos por centros y comunidades, que antecedieron los comicios del 26 de marzo, y deberán continuar realizándose periódicamente.

En qué lugar o momento la población en los barrios, y los trabajadores y los estudiantes en sus respectivos centros, no se refirieron a acuciantes problemas por resolver en materia de producción de alimentos, de los altos precios o la indetenible inflación, de la construcción o reparación de viviendas u otras instalaciones sociales, de  atender mejor a comunidades y personas en situación de vulnerabilidad, de la pobre calidad en determinados servicios, de las carencias con el transporte,  del papel de la empresa estatal  y del municipio, de la estrategia de desarrollo local…

La lista de dificultades y de retos es bien extensa, como también sin que mediara alguna promesa se convocó a las masas a participar en la solución de aquellos asuntos que no dependieran de grandes recursos financieros y materiales, sino de la voluntad, el deseo y el compromiso de quienes tienen la responsabilidad de conducirlos o ejecutarlos.

Cuando muchos desde el exterior –y dentro del país-apostaron por altos porcentajes de abstencionismo o de boletas en blanco, los resultados de las votaciones reafirmaron la infinita confianza de la mayoría de los cubanos en su Revolución, por lo que en este nuevo mandato habrá que hacer lo imposible por no defraudarlos y demostrar que entre todos es posible un socialismo próspero y sostenible.

INTERESANTES OPINIONES DESDE LAS REDES SOCIALES RESPECTO A LA ECONOMIA CUBANA

Y como en temas de economía (quizás por lo deteriorada que se encuentra la nuestra) muchos consideramos tener la respuesta definitiva -tal cual sucede en la pelota-, bienvenido entonces a cuantas opiniones se susciten alrededor de un tema, por complejo o polémico, pues sin dudas siempre dejan enseñanzas, alertas, consensos, tendencias y posibles soluciones. 

Casi 50 comentarios de cibernautas suscitó el anuncio de que el domingo 26 de marzo en el programa Cuadrando la caja el Doctor en Ciencias José Luis Rodríguez, Premio Nacional de Ciencias Sociales 2022, ofrecería un análisis de la economía, en el que abordaría la historia económica del Socialismo, su relación con el mercado, las particularidades de Cuba, los desafíos que ha enfrentado y enfrenta, y las posibles estrategias para superarlos.

Entre esas opiniones vale destacar la de un tal Catalejo:

“Pienso que mientras siga secuestrada la calidad, mientras no haya disciplina, ni se trabaje con responsabilidad, dedicación, mientras el trabajador no vea el trabajo como una fuente de ingreso real que él pueda satisfacer sus demandas más inmediatas y las de su familia, la caja de la economía cubana seguirá descuadrada, seguirá creciendo marabú en el patio de Liborio donde la siguaraya es su árbol preferido. ¿Cuánta gente se ha leído el libro, “Cambiando la mentalidad”, del profesor Calviño? Poner en práctica sus ideas sería dar un paso hacia adelante y avanzar en nuestro proyecto social”.

Y un tal org dijo:

“Muchas medidas adoptadas, muchos planes, muchas buenas intenciones. Pero en la realidad muy poco resultado.

“Nunca fui muy devoto a la introducción de nuevos actores económicos, mucho menos a ese auge o apuro donde al parecer la tarea principal del Ministerio de Economía es aprobar y

divulgar a bombo y platillo cada lote de mipymes. Y que conste que no se trata de que tenga algo en contra de los TCP y mipymes. El problema es que considero que por un lado no están creadas las condiciones mínimas necesarias, fundamentalmente un mercado mayorista o la posibilidad real de importación directa.

“Se planificó un encadenamiento productivo entre todos los actores económicos y desde mi punto de vista lo único que se ha logrado es encadenar las empresas estatales a estos actores, las que en la práctica han quedado atadas de pies y manos”.

También desde la plataforma de Cubadebate Udelter Hechavarria Laffita escribió:

“A mi juicio, y como ya se conoce, uno de los grandes responsables de la inflación es el déficit presupuestario que está provocado por un enorme bloque de subsidios y entidades presupuestadas que el sistema empresarial no  es capaz de financiar.  OJO no es eliminar las conquistas de la Revolución sino dejar lo necesario. A lo largo de los años este déficit se cubre con deuda pública o que es lo mismo inyectando dinero en la economía sin respaldo productivo; esto es igual a que existe dinero en la calle, demandas insatisfechas y hay un grupo de personas que están dispuestas a pagar un precio mayor por los productos escasos, quedando en situación de vulnerabilidad económica una porción cada vez mayor de la población.

“No observo cómo la política monetaria fiscal están regulando la inflación. ¿Por qué los bancos no lanzan un producto financiero lo suficientemente atractivo para que las personas coloquen sus ahorros y con ellos regulen el circulante que hay en la calle?

Urgencia es la palabra del momento”, concluye diciendo este cibernauta entre otras ideas.

CONFIANZA EN NUESTRO PARLAMENTO, EN SUS ANALISIS Y DECISIONES

No olvidemos que para el 2023 se mantiene las restricciones económicas y financieras que imponen el recrudecido bloqueo estadounidense,  el incremento de la inflación global expresado en  los costos de las materias primas, insumos y productos importados, unido a la limitada capacidad para generar mayores ofertas de bienes y servicios que permitan la recuperación del equilibrio monetario.

La búsqueda de divisas es el principal reto, y así se consta en el Plan de la Economía y Ley del Presupuesto del Estado para el presente año, aprobados en diciembre pasado por la Asamblea Nacional del Poder Popular, y cuya principal concreción  está en los municipios, no solo a nivel  de país.

En opinión del Doctor en Ciencias José Luis Rodríguez “la economía debe fortalecerse en cuatro áreas específicas: buscar alternativas para renegociar la deuda externa y destrabar el financiamiento externo indispensable; frenar la inflación; hacer mayores inversiones en la industria alimenticia, y ser más sistemáticos en las inversiones en el sector energético, empezando por el mantenimiento de las termoeléctricas”.

Aunque desde las redes sociales un tal Alexis sugirió que mejor será que el compañero (José Luis) hable en la Asamblea Nacional pues quizás allí va y se puede resolver algo (en alusión al endeudamiento y a otros fenómenos), confío plenamente que en el seno de nuestro Parlamento hay diputados muy capaces, con los pies sobre la tierra y muy pegados a la base, conocedores del sentir y las preocupaciones de la gente, y que aportarán ideas, promoverán intensas discusiones alrededor de alguno u otro de los temas señalados.

También realizarán el necesario control y supervisión en organismos y territorios para comprobar cuánto se hace por mejorar la calidad de vida de la población, por la reanimación de la economía.

De ellos el pueblo no solo espera profundos análisis sino soluciones  concretas, algunas impostergables, en las que también la participación popular es imprescindible.