Contar en presente la historia de los trenes(+Fotos)

Quizás muchos se asustaron aquel 13 de noviembre de 1837 cuando vieron llegar, por caminos de hierro martillados en la tierra, a aquella mole rodando. Dicen los más viejos que las primeras locomotoras eran inglesas, y que al año fueron sustituidas por maquinas norteamericanas.

Lo cierto es, y así lo afirma la historia que ha llegado a nuestros días, que el primer tramo ferroviario en Cuba fue el Habana-Bejucal. Con aproximadamente 27,5 kilómetros, fue inaugurado oficialmente seis días después del viaje de prueba de ese primer tren, que desde el Taller de Ciénaga se deslizó por las paralelas de hierro hasta el poblado de Bejucal.

La puesta en marcha del entonces moderno medio de transporte significó un gran paso de avance para el desarrollo económico y comercial de la Isla, pues permitía acortar las distancias y disminuir considerablemente los tiempos de los recorridos. En esa época se empleaba fundamentalmente para mover productos tales como caña de azúcar, tabaco, mieles, maíz y café.

También tuvo gran impacto en la transportación de pasajeros, y más aún cuando fue extendiéndose por toda Cuba. Sin embargo, con el impacto de los crudos años del período especial, la historia ferroviaria parecía que iba a desaparecer junto con el ferrocarril.

La constante explotación, y durante mucho tiempo, de la vía férrea y los equipos ferroviarios, afectados por la falta de piezas de repuesto, deterioraron los servicios. Las condiciones de los coches no eran las mejores, los viajes disminuyeron y se volvieron lentos e inestables, los desperfectos técnicos de la vía provocaban descarrilamientos...

La puesta en marcha entonces, por la más alta dirección del país, de un programa de recuperación destinado a rescatar el sistema ferroviario nacional, lo está haciendo renacer nuevamente, con positivos impactos para la economía y la población.

EL FERROCARRIL CUBANO COMO EL AVE FÉNIX

Las acciones de rehabilitación, que comenzaron en el año 2010 con el apoyo del Ejército Juvenil del Trabajo, comprenden labores de reparación y mantenimiento de las principales vías férreas del país, sobre todo de la Línea Central, y otras de interés nacional, como el ferrocarril eléctrico de Hershey, cuya revitalización este año permitió aumentar el nivel de transportaciones de pasajeros y reiniciar el traslado de cargas hacia distintas zonas del país.

También se trabaja arduamente en los talleres de la Unión de Ferrocarriles de Cuba para echar a andar vagones que se encontraban en un avanzado estado de deterioro, y que hoy transitan gracias a enormes esfuerzos que en estas unidades despliegan los trabajadores ferroviarios para reconstruirlos.

Resultan igualmente importantes las labores referidas a la implementación de un moderno sistema de comunicaciones ferroviarias basado en una red de fibra óptica que enlazará a las estaciones de la Línea Central con otros ramales de importancia económica y social, inversión que ubicará una frecuencia de telefonía móvil exclusiva para la infraestructura ferroviaria.

Por otra parte, una nueva estructura organizativa comenzó a implementarse a mediados de año en la Unión de Ferrocarriles de Cuba, la cual permitió disminuir las numerosas relaciones económicas mercantiles de la entidad en el orden interno, así como una mejor distribución y control de los medios.

Estas y muchas otras acciones se llevan a cabo diariamente para enchufarle vida al ferrocarril, y convertirlo en un sistema seguro y eficiente, con la disciplina que siempre lo ha caracterizado.

Los resultados, aunque modestos, se notan. Es una realidad palpable la mayor participación que tiene hoy el tren en las transportaciones de cargas y pasajeros, aunque todavía falta mucho por lograr en ambas modalidades, como trabajar más por el confort y los servicios de calidad en los trenes de pasajeros, y evitar demoras en la descarga de las casillas ferroviarias, que tienen un impacto negativo en la economía nacional.

ACTIVIDADES CULTURALES POR LA CELEBRACIÓN

Con vistas a festejar los 175 años de la entrada del ferrocarril a la Isla, y no dejar pasar por alto esta fecha, son varias las actividades que se han desarrollado. Una de ellas consiste en la exhibición, en el Palacio de Gobierno, de la capital cubana, de una reproducción de uno de los tranvías que circularon por La Habana.

La muestra Tranvías en La Habana, que se encuentra abierta al público, incluye vajillas, cubertería y otros objetos que fueron utilizados en el Coche Mambí, y lienzos de pequeño y mediano formatos que recrean imágenes de la época.

Además, el Coche Mambí, vagón construido en 1912 que fungió como vehículo presidencial, se encuentra abierto también a quienes pasean por la propia calle Oficios, tras una restauración integral por parte de la Oficina del Historiador de la Ciudad.

Un encuentro sobre patrimonio histórico ferroviario, con motivo también del décimo aniversario de la creación del Museo del Ferrocarril de Cuba, se celebrará este 20 de noviembre, a partir de las 9:30 de la mañana, en la Casa Conde Cañongo (Plaza Vieja). En el podrán participar historiadores, investigadores, colaboradores, ferromodelistas y otros especialistas del patrimonio cultural, y se abordarán temas tales como el centenario de la construcción de la Estación Central en los antiguos terrenos del Arsenal y el rescate de las locomotoras a vapor, labor en la que está inmersa la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana.

Locomotoras chinas benefician el transporte ferroviario cubano.

El tren eléctrico de Hershey, construído hace un siglo, sigue siendo una buena opción.

Avance positivo del Ferrocarril en transportaciones de carga y pasajeros.

Con más de nueve mil kilómetros, las líneas férreas se extienden por toda la superficie  de Cuba.

Cuba fue uno de los primeros países en el mundo en poseer ferrocarril.