La coctelería cubana es un referente mundial teniendo en cuenta su historia, su sabor, su colorido y la presencia insustituible del ron ligero cubano como base de sus mezclas. El Cuba Libre, el Presidente, Mery Pickford, Ron Collins y Saoco, son muestras fehacientes de lo anteriormente expresado, y con ello cerramos el ciclo iniciado en semanas anteriores sobre la coctelería clásica cubana.
CUBA LIBRE
Esta deliciosa mezcla de ron cubano y gaseosa de cola tiene su historia muy relacionada con la victoria de las fuerzas mambisas cubanas sobre el colonialismo español y la oprobiosa intervención militar estadounidense en nuestro país.
Gracias a las excelentes mieles cubanas y a la larga tradición productora, ya el ron cubano era apreciado mundialmente y se había convertido en un exquisito ron refino. A esto unimos que junto a los militares de la nación norteña entro a Cuba la Coca Cola, excelente gaseosa de color oscuro que inmediatamente se hizo muy popular.
Entre las versiones que se cuentan acerca del surgimiento de este coctel, una de las más creíbles y extendidas cuenta que entre los años 1901 y 1902 las tropas norteamericanas que llegaron a Cuba, mezclaban regularmente ron Bacardí y bebida de cola en un vaso de los utilizados para consumir whisky. Esta bebida comenzó a denominarse Cuba Libre, en honor al grito de batalla de las tropas cubanas
Se dice que una tarde, un grupo de soldados fuera de servicio del cuerpo de trasmisiones del ejército de EE.UU. se encontraba en un bar de La Habana Vieja. Un joven mensajero, Fausto Rodríguez, recordaría más tarde que un capitán de apellido Russell llego y pidió un ron Bacardí con Coca Cola, hielo y una porción de lima. El capitán bebía la mezcla con tanto placer que despertó el interés de los soldados a su alrededor, por lo que pidieron al barman que preparara una ronda de la bebida para ellos. En medio del ambiente de diversión y camaradería un soldado propuso brindar: “¡Por Cuba Libre!”, para celebrar la reciente libertad del país. El capitán alzó su brazo y profirió el grito de batalla de los victoriosos mambises cubanos: “¡Cuba Libre!”. La respuesta de la multitud fue unánime: “¡Cuba Libre!”, vociferaron. Y así el grito de batalla se convirtió en sinónimo de fiesta y felicidad.
El Cuba Libre es un coctel cubano muy gustado (Tomada de Cubago)
Receta:
En un vaso tubular alto, verter:
45 ml de ron blanco.
Completar el recipiente con refresco de cola.
Gotas de zumo de limón.
4 o 5 cubos de hielo.
Verter el limón y el ron, llenar el vaso con hielo y completar con la cola.
Decorar con rodaja de limón y acompañar con una pajilla o absorbente.
MARY PICKFORD
Este coctel debe su nombre a la genial actriz canadiense de cine mudo que entusiasmó al mundo durante los años 20 del pasado siglo con sus casi 200 películas.
Se cree que fue creado en 1928 por el legendario barman Eddie Woelke, un estadounidense que tuvo que dejar su país durante la prohibición o ley seca de los años 1920 a 1933. Llegó a La Habana para trabajar en, ciudad donde transitó por los más famosos locales capitalinos. Fue durante la estancia habanera de la actriz, en ocasión de la filmación de una de sus películas, que Woelke creó este famoso coctel en honor a la celebridad.
Hay otra versión que concede la paternidad del coctel a Constantino “Constante” Ribalaigua, propietario del afamado Bar- Restaurante El Floridita.
Este coctel debe su nombre a la genial actriz canadiense de cine mudo (Tomada de OkDiario)
Receta:
En una coctelera, verter:
45 ml de ron blanco.
45 ml de néctar de piña.
5 gotas de granadina
5 o 6 cubos de hielo.
Agitar enérgicamente durante 30 segundos y servir colado en copa para coctel. Puede ser decorado con rodaja de piña.
PRESIDENTE
La historia de este coctel está ligada a la figura del General del Ejercito Libertador Mario García Menocal, tercer presidente de Cuba, en el periodo de 1913 a 1921. Se cuenta que la invención del coctel ocurrió en un bar habanero llamado Vista Alegre. Era visitado con mucha frecuencia por el General Menocal, que poseía un refinado gusto al beber y le agradaba la profesionalidad y cortesía del barman que allí trabajaba. También existe una versión que recrea el origen de este coctel en el emblemático bar El Floridita. Se plantea que un día se personó allí García Menocal, y le solicitó a su propietario y popular barman “Constante” que mezclara ron, vermouth blanco y unas gotas de Curacao, le adicionara hielo, lo revolviera y se lo sirviera en una copa. Al terminar la preparación de la bebida, y en un gesto de respeto, “Constante” le comentó: “General, aquí tiene usted su Presidente”. Quedaría bautizado así para la historia el famoso trago.
El coctel lleva Vermouth blanco y ron blanco entre sus ingredientes (Tomado de Barexpres)
Receta:
En un vaso de composición o mezclar, verter:
5 ml de Curacao Rojo.
15 ml de Vermouth blanco.
45 ml de ron blanco.
Revolver durante 20 segundos y servir colado en una copa de coctel. Retorcer sobre el mismo una cáscara de naranja para aromatizar, decorar con la misma y una guinda roja.
SAOCO
Este coctel tiene sus orígenes en las dotaciones de esclavos de la isla. Ellos habían utilizado la mezcla de alcohol y agua de coco como tónico. Además, por la composición de sus ingredientes, bien puede considerarse como parte de las bebidas consumidas por los mambises. En su composición original, no se le incorporaba ni azúcar ni hielo, sino solo agua de coco y aguardiente, mezclados dentro del propio fruto.
El saoco se puede servir también en un coco freso (Tomado de Cubago)
Receta:
En un vaso tubular alto o preferiblemente en el propio recipiente natural (coco fresco), verter:
60 ml de ron blanco
120 ml de agua de coco
4 o 5 cubos de hielo
Revolver y servir con un absorbente.
RON COLLINS
Este coctel, que llega a la Habana de manos de barmans norteamericanos, es la reinterpretación cubanizada del famoso Tom Collins, que se elabora con Ginebra. El término Collins está referido a una tradicional clasificación de cocteles que son preparados en vasos largos tubulares.
El Ron Collins es la reinterpretación cubanizada del famoso Tom Collins (Tomada de Cocktelia)
Receta:
En un vaso tubular alto, verter:
½ cucharilla de bar de azúcar refino.
15 ml de zumo de limón.
Diluir bien y agregar:
45 ml de ron blanco.
4 o 5 cubos de hielo.
Completar el recipiente con agua de soda o gaseada. Decorar con una rodaja de limón.
Entonces, manos a la obra
Con estos cocteles, concluimos la serie dedicada a la coctelería clásica cubana. Sin dudas, se caracterizan por ser muy ricos, además de muy sencillos en su preparación. Por lo tanto, resultan ideales para ser preparados en cualquier ocasión, disfrutar entre amigos o con la familia.
No se necesita ser un experto barman para elaborar estas ricas bebidas que, además, están cargadas de la esencia de la cubanía.
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